Calidad y destreza en la capital

Tras una temporada en la que predominó el gran nivel de todos sus deportistas, el Club de Tenis Jaén celebró las finales de la Liga de Invierno que organiza la entidad. Unos partidos que se jugaron con un retraso considerable, ya que se tuvieron que aplazar en dos ocasiones por las lluvias en el mes de abril. De esta forma y una vez finalizadas las fases regulares y el play off, en una mañana casi veraniega, numerosos socios del club, junto con familiares de los finalistas, se dieron cita para disfrutar de una jornada en la que, con el tenis como principal protagonista, predominó un ambiente de convivencia, alegría y unión.

A las once de la mañana arrancaron las finales de las diferentes categorías. Así, en la Tercera División, el encuentro enfrentó a Diego Carrillo y Jesús Castilla. Fue un duelo interesante, en el que Carillo se impuso claramente a su contrincante, sacando, también, a relucir el talento de su zurda, que seguro dará mucho tenis en las categorías superiores. De esta forma, el partido terminó con un resultado de 6-1,6-2.

En la Segunda División, la final fue entre Paco Cobaleda y Pedro Jesús Liébana. Un maratoniano encuentro entre dos consumados especialistas en “meter siempre una bola más”. Finalmente, consiguió la victoria Cobaleda por un apretado marcador de 4-6; 6-2 y 11-9 en el supertiebreak de desempate. Por su parte, en la Primera División, fueron Manu Malo Cascajares y Alberto Bermúdez los que se enfrentaron. Dos de los “cañoneros” del club que queman la bola con cada golpe. De hecho, se vieron puntos de verdadero mérito. Al final, se impuso la experiencia y potencia de Malo Cascajares, uno de los clásicos en las finales del club con un claro marcador de 6-3, 6-1.

La final de División de Honor empezó a las doce del mediodía y, este año, se repitió la misma que la de la pasada temporada; Serafín Coronado y Roberto Ochoa. A ambos se les notó la inactividad en las pistas de las últimas semanas. Ochoa acusó las molestias en su muñeca derecha, que no le permitieron entrar en el partido casi en ningún momento, ya que estaba a ratos ofuscado y más errático de lo normal. A lo que hay que añadir el calor que, sin duda, afectó a ambos jugadores. Por su parte, Serafín Coronado siguió en su línea de jugador rocoso que devuelve todo y sorprende con sus contraataques al contrario. Los dos tenistas desplegaron un juego irregular, con buenos puntos, aunque, finalmente, se impuso la solidez y el espíritu de lucha de Serafín Coronado, que se llevó el título de Campeón de la Liga Invierno-2019 con un claro marcador de 6-1, 6-3.

Desde el club se dio la enhorabuena a todos los campeones y finalistas por participar en una cita en la que todos los presentes disfrutaron del tenis.