Año nuevo, vida nueva

    07 ene 2019 / 11:30 H.

    Tras la derrota en Linarejos, se volvió a perder el primer puesto y se dio pie a cuestionar de nuevo el nivel del equipo ante los rivales de más entidad. Ya se cayó en Antequera y casi en Motril, faltando en la segunda vuelta por visitar a El Palo. No es buena señal de cara al play-off, pero tampoco significa que no se pueda conseguir el ascenso. La mesura y la estabilidad siempre son buenas herramientas para analizar resultados, mejorar e insistir sean buenos o malos. No me gustan los análisis cortoplacistas que solo se basan en un resultado puntual derivando en vaivenes de opiniones en función de los mismos. El equipo luchará toda la segunda vuelta por un objetivo claro como es el primer puesto que da como sabemos muchas más opciones de ascenso, por lo que lo peor de la derrota en Linares fue dar vida a un rival que podía haber quedado tocado en esta batalla. Hay que seguir creyendo en plantilla y cuerpo técnico, pues de sobra tienen nivel para el cometido. Solo arriba nos falta un repuesto de garantías y ante el River Antonio López debía haber cumplido ciclo de amonestaciones. Una oportunidad perdida que esperemos no tener que lamentar en un partido de mayor complejidad, porque todo lo que no sea ganar bien hoy si que será una decepción y un mazazo moral.