Vuelve la voz de Machado

El cantautor interpreta en Baeza los poemas Llantos y coplas y Cantares

13 jul 2018 / 08:07 H.

El atardecer dio paso a una noche fresca de verano, una velada que, en la Plaza de Santa María de Baeza, sus vecinos y visitantes vivieron de una manera muy especial. La gira Mediterráneo da Capo de Joan Manuel Serrat aterrizó en el ciudad patrimonial para ofrecer uno de los conciertos más íntimos del artista, uno en el que, como no pudo ser de otra manera, hubo algunas referencias a Antonio Machado. Y es que allí se vivió lo que pudo ser el “epicentro del arte” por antonomasia pues coincidieron, a la vez, la música del cantautor y las letra del poeta, que vivió entre esas calles desde 1912 hasta 1919.

“Es un placer estar en esta ciudad haciendo música y respirando olivos y a Machado”, indicó el catalán tras abrir el concierto con Mediterráneo, perteneciente al disco homónimo al que homenajeó por su 47 aniversario. Y es que Serrat nunca se olvidó de los versos del sevillano. Muestra de ello es Dedicado a Antonio Machado, poeta, el quinto álbum de su carrera discográfica —publicado en 1969— del que interpretó, en esta ocasión, dos canciones. Se trataron de Llanto y coplas y Cantares, que sonaron al ritmo de su guitarra, de la cual no se separó, y la viola de Uixi Amargós.

Esta última interpretación caló en el alma de todos los espectadores, que no dudaron en sacar sus móviles y convertir las gradas en una luminosa marea de flashes que inmortalizaron uno de los momentos más especiales. Sobre el telar blanco que coronaba el escenario se proyectó un cielo en pleno atardecer sobre el que volaban, en libertad, algunos pájaros. “Caminante no hay camino, se hace camino al andar”, corearon los asistentes siguiendo uno de los poemas más musicalizados y versionados en el panorama artístico. Y es que con este tema, Serrat ayudó a popularizar una obra que, como bien dice su letra, llenó de emoción “golpe a golpe y verso a verso”.

Un mar de aplausos inundó, tras finalizarla, la Plaza de Santa María. Le siguió una lluvia de vítores con la que muchas personas se pusieron de pie en señal de admiración. Ante tal muestra de cariño, el cantautor se sintió en casa, y añadió: “Sigamos haciendo camino”. Así introdujo Plany al mar, el único tema en catalán que cantó en toda la noche y que forma parte de su disco En directo, publicado en 1984. De esta manera, Serrat y Machado se volvieron a encontrar, una vez más, a través de la música y los versos, y en un tierra, además, amada por ambos. De esta manera, Baeza escribió una página más en su historia en la que quedó grabada la magia de una velada musical llena de ritmo, poesía y talento.