Viejas leyendas que respiran aires nuevos

No podría abordarse la historia del blues en España sin hablar de Mingo Balaguer, que ayer emocionó al público de La Fábrica el Arte, junto al joven y prometedor Kid Carlos. Ambos, Balaguer a la armónica y Kid Carlos a la guitarra conquistaron a los jiennenses que, en la media tarde de ayer, acudieron al local situado en la calle Teodoro Calvache para disfrutar de la armonía de esta gran pareja artística de la música.

Junto a los momentos más melódicos, destacaron la pasión por los ritmos sureños que corren por las venas de estos dos músicos, diferenciados en cuanto a trayectoria profesional se refiera, pero unidos por la misma alma “blusera”. Mientras que Mingo Balanguer triunfa desde hace años en los escenarios de Estados Unidos y Europa —desde que comenzara a tocar la armónica con 11 años, lo que le permitió construir un camino que le llevaría a formar parte de la legendaria Calendonia Blues Band—, el sevillano Kid Carlos demostró una vez más que la guitarra es una extensión más de sí mismo, con la que pintó en el aire del céntrico local un amplio abanico de matices, tonalidades, intenciones y sentimientos entonados en cada uno de los acordes.

Al ritmo de los temas más movidos y lo interludios más trepidantes, ambos músicos no perdieron el compás uno del otro durante una actuación que probó, una vez más, el virtuosismo de ambos, capaces de alcanzar las notas más sutiles y conmovedoras provocadoras de auténticos “pellizcos” en el corazón de los jiennenses.

Una velada que marcó el preludio de un fin de semana dedicado al género de los lamentos desgarradores de B.B. King, Robert Johnson o Muddy Waters, que finalizará esta tarde con el directo de Mississippi Martínez, en el mismo escenario, pero a partir de las seis de la tarde.