Víctor Manuel conquista los corazones arquilleros

Llegó Víctor Manuel a Arquillos dispuesto a darlo todo durante la noche del pasado sábado en el municipio jiennense de Arquillos, puerta de entrada a la comarca de El Condado. Y así fue. Solo bastaron las tres primeras canciones para introducir lo que sería una intensa noche de voz y música en directo. Un espectáculo musical en toda regla. Empezó el concierto con La danza de San Juan, para dar comienzo a la fiesta, para seguir con Quiero abrazarte tanto y Baila, baila, bailarina, una introducción que no dejó a nadie indeferente. El público, fiel, no tardó en conectar con el artista asturiano, muy activo durante toda la noche.

“Estoy feliz de estar en Jaén, no sé las veces que he estado cantando en Jaén desde 1970 que fue la primera vez”, destacó el cantante. Nada más empezar se mostró agradecido y ya “amenazó” con dar la tabarra con sus canciones y así lo hizo. Hasta 25 de sus canciones de toda la vida cantó, acompañado de una banda de seis grandes músicos durante las dos horas que estuvieron sobre el escenario de Arquillos Suena. Canciones que resumen lo que ha sido su vida, su historia personal y la historia de su país, desde las de sus inicios hasta las más recientes.

Pero si algo bueno tiene este artista es que va metiendo al espectador en sus canciones, en sus letras, con una pequeña historia de cómo, cuándo y por qué escribió dicha canción. Esto, como espectador, se agradece, te ayuda a entender mejor cada letra de cada una de estas interpretaciones. Sus primeras canciones, cuando aún no era conocido, las que le dedicó a su padre, a su abuelo, a su tierra o a su hija... no faltaron los grandes clásicos de este artista. Tampoco faltaron aquellas que les han dado muchas alegrías a lo largo de su carrera musical. En la primera parte, acompañado por todos los miembros de la banda, Soy hijo de ferroviario y Me gusta saber de ti, escritas para su padre y su hija, fueron varias de las más aplaudidas por los asistentes, que solo con escuchar los acordes primeros se emocionaban. Llegó una pausa mediados el concierto y Víctor Manuel se quedó con los músicos Ovidio López y Juan Cruz, guitarra acústica y piano, para hacer un recorrido por varias “canciones prehistóricas” que le marcaron profundamente, como La romería o El cobarde. A partir de aquí, el de Mieres enfilaba la recta final del concierto, con la canción que le escribió en 1978 con la historia de Mari Luz y Antonio, dos personas que se enamoraron en una residencia de Cabra, en Córdoba. “Historias que te reconfortan y una de las canciones que más alegrías me ha dado”, destacó el artista, antes de interpretar Solo pienso en ti.

Gente de pie y emocionada, igual que cuando cantó En la planta 14 o Asturias. Pero el público quería más. Y así fue. El asturiano “regaló” otras dos interpretaciones a un público ilusionado a la luz de la luna de Arquillos. Concluyó con Cómo voy a olvidarte y Esto no es una canción, que los asistentes agradecieron con una gran ovación de despedida puestos en pie.

Una gran noche la que vivimos los que tuvimos la suerte de asistir a este gran espectáculo musical en directo. Víctor Manuel estuvo acompañado por los músicos Ovidio López y Osvi Greco con las guitarras; Mario Carrión a la batería; Dani Casielles con el bajo; Juan Cruz con el piano y Santi Ibarreche con el saxo, flauta y percusión. Pero esta gira del asturiano tiene también sello jiennense, ya que el iliturgitano Miguel Ángel Jiménez “Negro” es el jefe técnico de toda la gira “75 Aniversario, la vida en canciones”. La gira acaba de llegar a su ecuador y este concierto de Arquillos es el único que Víctor Manuel ofrecerá en toda la provincia jiennense. Una gira que comenzó a principios de año en Santander y que finalizará el próximo mes de diciembre en Madrid. Los artistas agradecieron la respuesta del público a su gran actuación con las dos últimas canciones de la noche. Sin duda, los asistentes ya guardan en sus corazones esta brillante actuación del artista asturiano y los músicos que lo acompañaron.