Una noche para el recuerdo

Música y reconocimiento a una labor encomiable en el colofón de los festejos del X aniversario

06 oct 2019 / 16:58 H.

Broche de oro a una gran celebración, puesto que una década no se cumple todos los días. Una labor ejemplar y dedicada al cuidado y mimo a los mayores de la Residencia Altos de Jontoya. Aquello que bien podría ser sinónimo de remanso de paz y tranquilidad acabó convirtiéndose en una auténtica fiesta. No faltaron la alegría y compañía de muchas familias de los residentes que no quisieron perderse algo tan especial. Hubo tiempo para todo, menos, precisamente, para pensar en los minutos que transcurrían. Y es que la celebración se extendió hasta prácticamente alcanzadas las doce de la noche. La Gran Rockset fue la encarga de otorgar el punto colorido y musical.

Precisamente, tras el primer pase del espectáculo ofrecido por la gran orquesta, fueron muchos de los protagonistas los que subieron al escenario. Y así lo hicieron para rememorar recuerdos y trayectoria de una residencia que ya cumple diez años. “Aún recuerdo los cubos de fregona y todo lo que tuvimos que hacer para ponerla en marcha”, recordó la directora del centro, Ana Casado. El aplauso colectivo levantó el vuelo en numerosas ocasiones. Los presentes en la entrada de la residencia gestionada por Edad Dorada-Mensajeros de la Paz irradió en todo momento una luz celestial que no dejó de reverberar en toda la velada. Y es que fueron muchas las palabras de cariño hacia trabajadores, residentes y sus familias que celebraron con alegría una década.