Una noche de cante muy minera

Noche muy emotiva en el Teatro Cervantes. Tras el pregón de la cincuenta y cinco edición del Concurso Nacional de Tarantas y Cantes de Libre Elección —a cargo de la paisana Carmen Linares— llegó el turno de la esperada final de Cantes de Libre Elección. El ganador se hizo con la estatuilla de un minero y un premio económico de 5.000 euros. Los otros cinco finalistas contarán con una compensación de 300 euros. Como artista invitado para esta ocasión, estuvo Alfredo Tejada, un cantaor malagueño de gran prestigio en el panorama flamenco mundial.

Después de la actuación del invitado y la de los seis finalistas, se hizo un pequeño receso para que el jurado deliberase quién era el merecedor del primer premio. Poco después, se reveló que Antonio Porcuna, “El Veneno” era condecorado con dicho reconocimiento. Entre los finalistas estuvieron Antonio Haya Morales “El Jaro”, José López Castro “El Sevillano”, Alba María Martos Garrido, Antonio José Nieto Fernández y Belén Vega Rus. Antonio Porcuna, “El Veneno”, agradeció a la organización y al jurado la oportunidad de recibir este premio tan importante para su carrera.

Esta tarde, a partir de las ocho, se celebrará la última fase del concurso. Se trata de la final de Tarantas. El Teatro Cervantes se despedirá ya de esta cita hasta el próximo año. El ganador del premio de tarantas se hará con la cabria de plata y premio económico de 10.000 euros. Los finalistas también recibirán el accésit de 300 euros. Asimismo, se conocerá el nombre del ganador del premio a jóvenes cantaores “Fernando Medina”, con una compensación económica de 800 euros. Se decidirá entre Juan María Guzmán Planas, de Bailén, y Antonio Mena Cano, de Jaén. Los guitarristas que han acompañado a los participantes durante todo el concurso son Juan Ballesteros, Fernando Contreras “El Cali” y Juan José Gutiérrez “El Calao”.

Todos los participantes han estado a la altura de un concurso que tiene ya un carácter nacional, puesto que se presentan artistas de diferentes provincias y con gran experiencia. Se trata de una forma de ensalzar un cante tan típico linarense como es la taranta. El área de Cultura del Ayuntamiento apuesta cada año por esta iniciativa para el pórtico de feria de San Agustín, puesto que se celebra desde hace más de 50 años. Esta es una forma de conservar las costumbres y para que los concursantes cuenten con una gran motivación de seguir proyectando su carrera dentro de la dificultad que supone vivir de la música. Antonio Porcuna Mariscal, conocido como “El Veneno”, recibe este reconocimiento en la modalidad de Cantes de Libre elección y, en pocas horas, se conocerá el ganador definitivo en la modalidad de Tarantas de este concurso con calado nacional.