“El carnaval lo hace la gente”

Ignacio Ruiz Merino

12 feb 2020 / 12:44 H.
Ver comentarios

—Este año el carnaval de Jaén busca recuperar antiguas tradiciones, ¿cómo valora la programación presentada?

—Después de muchos años el Ayuntamiento vuelve a implicarse en esta fiesta y las decisiones que ha tomado me parecen un acierto. Han arriesgado y creo que vamos a vivir un repunte para el carnaval que esperemos que se mantenga y podamos recuperar lo que fue antaño. Hace casi 10 años que el Ayuntamiento no apostaba por esta fiesta.

—¿Qué representaba el carnaval para la capital?

—Si echamos la vista atrás, al carnaval más antiguo, hay referencias desde el Siglo XV con el carnaval como una gran fiesta para todo el pueblo que se extendía durante tres o cuatro días.

—¿Y en un tiempo más cercano?

—La última época fuerte del carnaval de Jaén comenzó a mediados de la década de los 80 del siglo pasado. Años después comencé a salir en agrupaciones. Por aquel entonces el Parque de la Victoria se convertía en una fiesta con el escenario que se montaba. En aquella época, solo los pasacalles de Canarias y Badajoz eran más potentes que el de aquí, ¡ni siquiera el de Cádiz! Había casi 90 carrozas.

—¿Y qué ocurrió para que la fiesta perdiera fuerza?

—Juan Antonio Quirós, un nombre que recordaré siempre, que por entonces era concejal en el Ayuntamiento, decidió que había que sacar la fiesta del centro de la ciudad y se la llevó junto a la plaza de toros. Eso lo mató, porque el carnaval lo hace la gente de la calle y se perdió el arraigo que se existía hasta entonces.

—Pero la fiesta siempre estuvo ahí, ¿cómo recuerda esos años?

—Viví desde dentro el carnaval desde 1988 a 2006 saliendo en diferentes agrupaciones, pero vimos cómo una fiesta potente se vino abajo. Nosotros, con la peña “El Cigarrón” ganamos el primer premio del concurso de agrupaciones todos los años menos uno, que fuimos segundos, además de lograr premios de letras o disfraces. A nivel personal soy quien más galardones tiene en este concurso, pero se pasó de un certamen con más de 30 agrupaciones a ver cómo decaía con el paso de los años. Entonces lo raro era no salir a calle disfrazado a disfrutar. Ahora el raro es el que lo hace, y es triste. En torno al año 2000, con Gustavo Martínez como concejal de Festejos del Ayuntamiento hubo un repunte, pero no se mantuvo en el tiempo.

—También fue jurado del concurso y pregonero del carnaval.

—He podido vivir el carnaval desde diferentes perspectivas y es una fiesta que enamora. A principios de siglo también hacíamos unas noches carnavalescas en las que traíamos a las mejores agrupaciones del carnaval de Cádiz, al día siguiente de celebrarse la final los teníamos contratados para venir en la fecha que queríamos a Jaén. Fue en la última época buena que tuvo esta fiesta en la capital.

—¿Cómo sobrevivió la fiesta?

—El carnaval, durante más de diez años, ha dependido del trabajo de la asociación de peñas, que se encargó de que el concurso continuara vivo, pero con sus particularidades: las cantidades de los premios iba a porcentaje y las agrupaciones que se presentaban no sabían ni por qué luchaban en el apartado económico.

—¿Cree que se podrá recuperar ese arraigo del carnaval?

—Si se consigue enganchar a los colectivos, estoy seguro que sí. El carnaval lo hace la gente de la calle, lo importante es conseguir potenciar esa parte de la fiesta para que todo el mundo esté implicado. Hay que ir poco a poco, pero después de que por allá por 2002 o 2003 no se quisiera saber nada de carnaval por parte de la clase política, porque es una fiesta que se utiliza para la crítica y al no haberla se ahorraban no solo el dinero, sino que se metieran con ellos, con esta apuesta por revitalizarlo se puede lograr que año a año vuelva a crecer.

Cultura