Un director y una obra, dos estrenos absolutos en Madrid
El vilcheño Alberto Conejero dirige La geometría del trigo en el CDN
Es su estreno como director teatral y lo hace por la puerta grande, a la inversa que en el mundo taurino, él entra, mientras que los otros salen. El día a día del dramaturgo Alberto Conejero es de puro nervio, ensayos y puesta a punto, para que nada quede al azar ni a la improvisación, aunque en el mundo del teatro, ya se sabe, pan nuestro de cada día. La cita es el 6 de febrero, en el Centro Dramático Nacional (Teatro Valle-Inclán) de Madrid. Será un estreno absoluto por partida doble.
El jiennense de Vilches pondrá sobre el escenario La geometría del trigo, a la que darán vida un grupo de seis actores noveles: Consuelo Trujillo, Eva Rufo, Zaira Montes, José Troncoso, Juan Vinuesa y José Bustos. Máximo riesgo y máxima expectación. Por no tener, ni siquiera tienen una compañía de referencia, pero sí una productora, la de Conejero: Teatro del Acantilado.
“La geometría del trigo —comenta el autor— es mi primera dirección de un texto propio. Además estoy implicado en la producción. Es una historia que parte de un recuerdo de juventud y, como yo soy de Vilches, uno de los recuerdos principales son los campos de olivos de Jaén y las últimas minas de plomo que había entre Linares y Vilches”.
Para Alberto Conejero, estrenarse en el Centro Dramático Nacional es hacerlo “en uno de los teatros de referencia, no solo de Madrid, sino del país. Es el lugar en el que han estrenado autores y autoras a los que admiro profundamente. Es una emoción grande y también una responsabilidad muy grande”.
La obra, como dice su autor, parte de sus propias vivencias personales, pero también es un trabajo de exploración e investigación escénica, que le permite regresar a su esencia más pura como dramaturgo, la que partiendo de sí mismo busca sinergias con el resto del equipo artístico. El resultado es un proyecto coral que huye de las estructuras escénicas piramidales. La escenografía es de Alessio Meloni y hace continuas referencias al mundo de la mina, del pasado destruido y de los pasos perdidos. Los otros “autores” de la puesta en escena son: Xavier Bobés, que ha hecho el trabajo de objetos; David Picazo, que diseñó la iluminación; Bruno Praena, que se encarga de los audiovisuales, y Mariano Marín autor de la partitura de este espectáculo. El proyecto es una producción de Teatro del Acantilado y cuenta con la colaboración de La Estampida, Producciones Teatrales Contemporáneas y Padam Producciones, y el apoyo expreso del Ayuntamiento de Vilches y de la Diputación Provincial de Jaén. El proyecto ha tomado forma y se ha ensamblado en una residencia artística desarrollada en Cuarta Pared.
“La geometría del trigo fue, en un primer momento, un recuerdo de juventud que mi madre compartió conmigo. ¿Por qué quiso entregarme entonces lo ocurrido a unos amigos en nuestro pueblo del sur justo antes de mi nacimiento? ¿Qué debía hacer yo con esas palabras y esos silencios? Con el paso de los años, el recuerdo de mi madre, transformado por la imaginación, se convirtió en un recuerdo propio, tan real como lo contrario”, relata Conejero.
La geometría del trigo también es, dice, “un viaje de norte a sur y de sur a norte, de ahora a entonces, y de entonces a ahora”. Alberto Conejero califica su obra como “una historia de tránsitos y transiciones entre tiempos, espacios, lenguas y formas de amar. Y de fondo las últimas minas de plomo entre los olivares”. Un intento de empezar de nuevo y de seguir juntos. “Porque el vínculo nunca desaparece y siempre estamos a tiempo de cuidarlo”, apostilla el dramaturgo. Y el mundo de la mina como una constante: “Siempre me llamó la atención de pequeño los restos de minas y los castilletes. Yo las veía, pero no las llegué a conocer, porque ya, la mayor parte, estaban cerradas. Pero para mí era algo fascinante”. La geometría del trigo podrá verse de martes a domingo, a las 18:00 horas, desde el 6 hasta el 24 de febrero, en la Sala Francisco Nieva del CDN.