Tomás Hernández gana el Premio Ciudad de Salamanca

Una vida entera dedicada a las letras. Es esta su pasión, su motivo por el que tantos años ha estado transmitiendo a sus estudiantes el encanto de la lengua y literatura. También de la lírica, puesto que, y como él mismo reconoce, siempre le ha gustado llevar libros de distinta índole a sus clases: “Igual no tenían mucho que ver con la materia pero sí era una forma de hacer llegar asuntos que a mis alumnos les interesaban”. Las palabras de Tomás Hernández derrochan sabiduría y una experiencia entre pupitres y polvillo de tiza que, sin duda, le ha llevado a hacerse con numerosos reconocimientos en el mundo del verso. El último que ha recibido el alcalaíno, afincado en La Herradura, es el XXII Premio de Poesía Ciudad de Salamanca.

“Es todo un honor recibir esta condecoración, especialmente, por el jurado excepcional que la otorga”, asegura Hernández. De este modo, hace alusión a parte de la comitiva de consagrados en el mundo del verso y la rima: “Antonio Colinas, un innovador en la poesía, ha presidido el jurado. También ha formado parte Juan Antonio González Iglesias. Me da mucha satisfacción que ambos hayan estado presentes, puesto que son dos poetas que admiro mucho y son un referente para mí”. No en vano, el poeta de Alcalá la Real se muestra especialmente ilusionado al ser la editorial Reino de Cordelia la encargada de editar el poemario con el que el prestigioso Premio de Poesía Ciudad de Salamanca ha caído en sus manos: “Estoy muy contento también por esta parte. La editorial trabaja con mucho gusto y esmero. El resultado será estupendo”. Eso sí, Tomás Fernández desgrana las claves de Nadie Vendrá, un compendio de poemas nutridos de guiños a la lírica clásica: “Consta de dos partes. La primera rinde un homenaje a un poeta valenciano muy amigo mío, que ya falleció, llamado César Simón. También a un personaje de sus poemas y que se trata de un escritor latino del siglo II después de Cristo. Su nombre es Marco Minugio Félix. En cuanto a la segunda parte, el estilo es completamente distinto. Los poemas hablan de un viaje, de vivencias, emociones, paisajes y, además, tienen mucho del paisaje urbano”. Estas son las claves del poemario Nadie Vendrá, el cual pronto verá la luz para enamorar.

En cuanto a la entrega del Premio de Poesía Ciudad de Salamanca, dotado con 8.000 euros, Hernández adelanta que lo recibirá a finales de año en un acto oficial de entrega. Será esta misma cita la que acoja la presentación de un poemario que ha “competido” con un total de 323 trabajos procedentes de España y de otros tantos países como Brasil, Chile, Colombia, Cuba o Portugal. No obstante, no es la primera vez que Tomás Hernández se alza con un premio de poesía. Y es que otros muchos avalan su experiencia y pasión en un mundo hecho para avivar los sentimientos por medio de la rima. El Premio de Poesía Ciudad de Zaragoza, en 2005; el Premio Antonio Oliver Belmás, en 2008, o el Premio Ciudad de Pamplona, en 2016, ha sido uno de los tantos recibidos por Hernández. Si bien, en su letanía de “triunfos” dedica un espacio especial al Premio Jaén, en 2007: “Lo guardo con mucho cariño. Fui el primer jiennense en recibirlo”.