Segura vivirá cinco intensos días de música

La tercera edición del festival se celebra desde el próximo miércoles con una previsión de público muy satisfactoria

07 may 2016 / 11:40 H.

Música de cámara en una almazara, un atardecer con banda sonora, marimbas en una aldea... Música en Segura se ha propuesto, por tercer año, sorprender al máximo durante los cinco días en los que el ritmo impregna todos los rincones de este bello pueblo serrano, y tiene muchos visos de conseguirlo. El festival ya está en la cuenta atrás, preparado para recibir a los músicos. El miércoles arranca esta nueva edición.

“Serán cinco días llenos de música”, comienza su director, el clarinetista orcereño Daniel Broncano —alma de todo este proyecto, una utopía que nació en 2014 y ya es toda una realidad— para referirse a la programación de la que disfrutarán tanto público local como espectadores llegados desde toda España y países como Inglaterra. “Comenzaremos el miércoles con el barítono Njabulo Madlala y el pianista Mario Mora, con un programa muy bonito, con obras desde Schubert a canciones espirituales americanas y tradicionales de Sudáfrica, su país”, detalla. Para el jueves, estrenará una singular iniciativa. “Que tengamos constancia, es la primera vez que una fábrica de aceite acogerá un concierto de música clásica”, dice el director. “Será en Orcera con el grupo de cuerda Camerata Alma Viva”, detalla. Y este especial escenario, tendrá también su eco en el repertorio. “Interpretarán la Sinfonía Italia de Mendelssohn, que se basa en el viaje del aceite de oliva ya en tiempos romanos. Es una reivindicación de la necesidad de comercialización de este producto tan nuestro”, destaca.

El viernes habrá doble sesión en el programa oficial. En la iglesia de los Jesuitas, el propio Broncano, acompañado por el piano, ofrecerá un conciertos y, por la noche, estrenarán otra novedad: el tango. Será con el cantante bonaerense Guillermo Rozenthuler. “Nos gustan las músicas afines a la clásica, que tengan el gusto de lo auténtico, que se disfruten con los músicos muy cerca”, reflexiona el clarinetista.

Y el sábado, sin apenas descanso, llegará muy cargado. Por la mañana, repetirán la experiencia de un concierto “progresivo” por las calles de Segura, con Alma Viva y un repertorio desde Haendel y versiones de rock con arreglos de cuerda. Por la tarde, los Baños Árabes acogerán ocho pases de diez minutos, conciertos para tan solo 20 personas. Esta es la única propuesta que, por ahora, ha agotado las entradas, excepto para los abonos, que tienen plazas reservadas, tal y como detalla el músico. “Será un baño en el que, en vez de vapor, habrá música, luz y colores”, imagina. Al atardecer, en el Parque del Obispo, habrá un concierto con obras relativas a la puesta del sol, para disfrutar del atardecer en directo. Y, por la noche, el flamenco y uno de los platos fueres, la cantaora Esperanza Fernández, acompañada por Miguel Ángel Cortés. Finalmente, el domingo, de nuevo en la era de la aldea de Moralejos, un dúo de percusión con marimbas regalará una gran experiencia a sus vecinos y, por la tarde, el recital de piano de Mario Mora, cerrará la programación.

“Tenemos una oferta complementaria de actividades, como dos sesiones con escolares de toda la sierra en el teatro de Orcera y la Camerata Alma Viva; un taller de canto con Guillermo Rozenthuler; una cata de vino con las bodegas Entredicho, que tienen viñedos en la sierra, y un aperitivo con los músicos, el sábado, para que se encuentren con el público, además de una exposición de fotografía”, detalla. “Estamos muy contentos al sentir el cariño del público”, reconoce el músico, ya que las previsiones son satisfactorias y mejorarán las cifras de 2015. La venta de abonos comenzó muy bien, con público fidelizado de años anteriores, y está vendido casi el 70%, aunque todavía quedan entradas para todos los espectáculos.