Risas y reflexión con los “cerdos simbióticos”

Un grupo alienígena perteneciente a la especie de los Cerdos Simbióticos se ve obligado a viajar a la Tierra tras provocar la destrucción de su planeta de origen: “Cochinín”. Siguiendo las indicaciones de una antigua leyenda, llegan a Cazorla, el pueblo donde reside John Trabuco quien, según esta, es la reencarnación de su mesías. Al llegar los cerdos al pueblo, la vida de sus extraños lugareños cambia y se preparan para una invasión. Por su parte, los cerdos tienen planes para conquistar la Tierra y perpetuar su especie. Este es el argumento de esta original “historia musical de acción fantástica”, La invasión de los cerdos simbióticos, escrita, producido y dirigida por Raquel Choy, la película con la que arrancaron las proyecciones especiales de la Muestra de Cine Inédito en Jaén, que hasta el 12 de marzo celebra su décimo quinta edición. Un argumento inverosímil e irónico, desquiciados personajes y disparatadas acciones conforman una insólita trama que, promete su directora, hará reír pero también reflexionar.

“La película relaciona dos mundos tan peculiares para que, al final, el espectador compruebe que, en el fondo, humanos y cerdos ‘simbióticos’ no son tan distintos”, detalla la directora barcelonesa con raíces en Cazorla, que, en la actualidad, dirige la escuela Cine en Acción. Ella estuvo en Jaén para la proyección y un encuentro con el público, acompañada por el editor de la película, Juan Manuel Moral. “Si sabemos leer entre líneas y despojamos la historia de su colorido, veremos cómo, además de hacernos reír, también nos dará en qué pensar”, concluye. Esta película fue rodada hace ya ocho años en Cazorla, una gran experiencia que la directora vivió mientras que todavía estudiaba. Hasta el municipio jiennense se trasladó todo el equipo técnico y artístico durante un mes. “Todo el pueblo se volcó, nos trataron muy bien”, recuerda. Y, tras ocho años, Raquel Choy quiso que sus vecinos fueran los primeros en ver el resultado. Estrenó La invasión de los cerdos simbióticos en el Teatro de la Merced en agosto. Este estreno les sirvió como “termómetro” con el público y decidieron acortar el metraje media hora. “Quisimos suplir la falta de medios y experiencia cuando la hicimos —el montaje se demoró ocho años por dificultades técnicas— con conseguir una historia con la que la gente se riera y creo que lo hemos conseguido”, explica.

La Muestra de Cine Inédito continúa hoy con la proyección de Ida y vuelta, de Juan José Patón, en la Biblioteca, a las siete de la tarde.