Misterio, amor y un dulce postre

La escritora jiennense Teresa Viedma presentó su última novela, El caso de las magdalenas envenenadas en la Casa de la Cultura de Torredonjimeno. El Club de Lectura del municipio invitó a Viedma a hablar de su libro, publicado por la Editorial Dauro.

Al acto asistieron, además de vecinos y seguidores, representantes políticos, entre ellos el alcalde, Juan Ortega Anguita y el cronista oficial, Manuel Campos Carpio, que presentó ante el público a la novelista jiennense y su último trabajo literario.

Viedma resaltó la labor de Esmeralda Bervell Mesas, la coordinadora del Club de Lectura, ya que sin su apoyo no se habría llevado a cabo la reunión entre lectores y escritora. “Aquí estoy como en mi casa”, declaró la autora sobre el municipio, a causa de los años que ha trabajado en él.

“No me sentí escritora hasta este momento”, comentó Viedma al referirse a la cita celebrada en la Casa de Cultura. “Estuve muy a gusto, acompañada de la gente que me animaba a seguir escribiendo y confesaba que eran mis seguidores”, dijo la autora, y concluyó: “Fue un acto precioso”.

La escritora subrayó el interés que mostraron los asistentes, que preguntaban sobre el libro con “conocimiento de causa”. Tanto el acalde como el cronista oficial alabaron su trabajo y definieron fragmentos de su texto como “auténtica poesía”. Durante la presentación se ofrecieron a los asistentes magdalenas, un regalo del Horno La Parra, como detalle por la historia de la novela, ambientada en un pueblo imaginario de Jaén.

A continuación, unas cuarenta personas del público disfrutaron, junto con la escritora, de una bebida y una buena conversación algo más íntima y cercana en el Casino, ubicado en la plaza central del municipio tosiriano.

argumento. Una reconocida novelista se traslada a un pequeño pueblo, un aparente remanso de paz y tranquilidad famoso por sus dulces, para escribir su siguiente novela. Hasta que el veneno hace su aparición y rompe el idílico encanto de Fuente Alta. Con un ritmo vibrante y buena dosis de tópicos y situaciones excéntricas aderezadas con sentido del humor, Teresa Viedma seduce de nuevo con una divertida maraña de enredos, personajes pintorescos y emociones contenidas, y luego desatadas, que envuelven una serie de asesinatos que el inspector Guzmán tratará de desentrañar.