“La extraña verdad” de Ruiz Amezcua, en La 2 de RTVE

Una verdad extraña” y “Singularidad en la poesía de Manuel Ruiz Amezcua” son los dos últimos libros del poeta de Jódar, y en ellos se centró Salvador Gómez Valdés, director y presentador del programa divulgativo de La 2 de Radio Televisión Española, en su emisión del Día de Andalucía: “La verdad es que hacía tiempo que queríamos hablar contigo”, manifestó Gómez nada más comenzar la entrevista.

El diálogo entre el periodista y el poeta, ensayista y profesor se inició con un repaso por la obra literaria del galduriense, que, como recordaron, inauguró su trayectoria poética a los veintidós años, con la publicación de su primer libro, “Humana raíz”; al hilo de ese debut, Ruiz Amezcua recordó su concepto de la poesía en aquel tiempo y suscribió la evolución experimentada con el paso de los años: “Hay cosas en las que me reconozco y que están metidas en todo lo que ha venido después y hay cosas que han evolucionado”, sentenció el poeta, y añadió: “Uno no es de piñón fijo”.

La conversación se centró también en los objetivos del escritor de Jódar a la hora de enfrentarse al folio en blanco: “Pongo al servicio de los demás todo ese aprendizaje del mundo, tanto en lo estético como en lo ético, es un intercambio; la poesía se hace en soledad, pero también a base de miles de miradas sobre el mundo y sobre los demás”, aclaró, y leyó el primero de los poemas de la mañana: “Vivo de las palabras, y las palabras traicionan...”, recitó.

Reflexionó, además, sobre los distintos tipos de poesía a los que el lector se puede acercar, y aludió a “esa que va de ejemplarizante y resulta que, luego, es todo lo contrario, porque cuando analizas el lenguaje y todo lo que tiene detrás te das cuenta de que está al servicio de lo contrario que dice”, expresó, crítico, Ruiz Amezcua. Se refirió, igualmente, a su labor docente y la posibilidad de acercar a los estudiantes el amor a la poesía y a los clásicos: “Cada día están más olvidados, pero son memorables siempre, y a un alumno le puedes hacer comprender eso, como me pasó a mí cuando leí a Lorca, a Góngora o a Machado, por ejemplo, y me dio un puntazo que me hirió”, dijo.

“He pretendido que mi poesía sea muy variada sobre el amor, el mundo, social, obras de arte...”, y puso voz a un texto amoroso al que, recordó, “Amancio Prada acaba de ponerle música”. Manuel Ruiz Amezcua, uno de los poetas jiennenses de todos los tiempos con una trayectoria más reconocida, dejó muy alto el pabellón de la literatura de aquí en la pequeña pantalla.