El viernes, en la Institución Ferial, se presenta el libro de Julio Millán

Una treintena de personas escriben sobre la vida y el compromiso de este sacerdote jiennense

11 sep 2019 / 16:39 H.

Julio Millán Medina va a tener un libro sobre su persona y su obra; no lo ha querido él expresamente, pero una treintena de amigos se han unido para darle voz a la vida de compromiso solidario de un jiennense que ha viajado por todo el mundo repartiendo cariño y ayuda, tendiendo la mano permanentemente. Así se recoge en el libro, cuyo título Entre amigos es una declaración de intenciones, según el coordinador de la obra, Juan Espejo, director de Diario JAÉN. Se trata, a tenor de los escritos de una personalidad única la de Julio Millán, que siendo natural de Bédmar, en Sierra Mágina, se hizo mayor en Jaén capital y que como sacerdote dedica su vida a los demás, a través de distintos proyectos humanitarios en pro de los que menos tienen y están en riesgo de exclusión social. Ahora es presidente de Mensajeros de la Paz y Edad Dorada y desde Jaén coordina proyectos solidarios en América Central y del Sur.

El libro será presentado de forma oficial el viernes 13 de septiembre, a partir de las 20.30 horas, en la sala Guadalquivir de la Institución Ferial de Jaén, con la asistencia del obispo Amadeo Rodríguez y del Padre Ángel, con el que trabaja Millán desde hace décadas. También el alcalde de Jaén, Julio Millán Muñoz, sobrino del sacerdote y el presidente de DIARIO JAÉN S.A., Eleuterio Muñoz, editor del libro.

El libro está concebido en tres grandes bloques, el primero de ellos, “La Vocación”, donde se da a conocer cómo brota en él la semilla del Evangelio, un segundo, “Las Misiones”, en el que amigos y amigas de Latinoamérica cuentan cómo vivieron la llegada de Julio Millán a sus países en su época misionera como cura de la Diócesis de Jaén y, finalmente una de “Mensajeros de la Paz”, que condensa su ingente trabajo con esta oenegé desde que empezó a colaborar con ella siendo aún estudiante de Teología en Granada. Como apostilla a su pensamiento, la entrevista que se realiza a Julio Millán donde le da repaso a todos los temas de actualidad y de la vida. Cada una de estas secciones está documentada gráficamente y como mayor conocimiento de la personalidad de Julio Millán, contiene poesías suyas de distintas épocas.

Magníficamente editado por imprenta Blanca y elaborado en su integridad por profesionales de Diario JAÉN, su coordinador, Juan Espejo, quiere resaltar el trabajo en nombre de todos quienes escriben las noches en vela para que esté a tiempo; de Manuel García, autor del diseño y del tratamiento gráfico y de Ana Gómez, la coordinadora general de la edición. También la labor recopiladora de fotografías de Paqui Fuentes y de Sonia Balarezo durante los meses que ha durado la edición del libro.

“Le agradeceré eternamente que me hiciera partícipe en su vida”
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María del Mar García es enfermera y rememora que conoció a Julio Millán cuando este era el sacerdote en la parroquia de San Bartolomé de la capital jiennense. Gracias a su hermano y a su cuñada, que colaboraban en el grupo de misiones de dicha feligresía, tuvo su primer encuentro con Millán, quien le ayudó a colaborar en distintos proyectos solidarios.

A partir de ese momento, María del Mar y Julio entablaron una amistad imperecedera. Tras la ordenación como cura de Julio Millán, García recuerda que pasó unos días en el municipio de Santiago-Pontones, el primer destino al que le mandaron en la Diócesis de Jaén, para encargarse de la parroquia del pueblo y de las aldeas.

María del Mar García quiere dedicarle estas entrañables palabras: “Le deseo todo lo mejor al Padre Julio, me hizo un hueco en su vida y nunca lo olvidaré. Es un honor participar en este libro, que hemos hecho con mucho corazón”.

“Su vida es la vivencia y la expresión de la solidaridad”
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Ruth Cecilia Mejía es doctora internista y docente de la Universidad del Azuay en Ecuador y médica del personal de la Universidad de Cuenca, también del país sudamericano. Mejía recuerda que conoció a Julio Millán en 1983, cuando él estaba de misionero en la feligresía de Sucúa, en la selva de Ecuador, concretamente en una parroquia del oriente del país, y en la que ella estuvo realizando sus prácticas laborales de Medicina.

Mejía declaró sobre Millán lo siguiente: “Su vida es la pura expresión de la vivencia del evangelio solidario, siempre con la mano extendida hacia los más necesitados, y con un gran corazón generoso, abierto y preocupado por los menos favorecidos de la sociedad”.

Tras Sucúa, se vinculó con Julio Millán a un nuevo proyecto pastoral y solidario en una de las zonas más deprimidas y con mayor umbral de pobreza de la comarca del Azuay en Ecuador, concretamente en la parroquia de Nabón, en los Andes.

“Ha hecho de su profesión una forma de vivir y afrontar la vida”
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Francisca Fuentes conoció a Julio Millán hace casi 30 años, prácticamente, los mismos que lleva trabajando con él en Mensajeros de la Paz. Marcó en su vida un antes y un después, ya que él supo ver las inquietudes de una joven y este ayudó a encauzarlas en lo que luego sería su forma de vida, con su trabajo en la Asociación de Mensajeros de la Paz, donde actualmente es la gerente a nivel andaluz.

“El primer contacto entre los dos fue cuando llegó a Castellar, como párroco de la parroquia del pueblo. Mi vida y mi trayectoria profesional se desarrollaron de la mano de Julio Millán, ya que trabajamos codo con codo en dicho colectivo y luego en Edad Dorada”, agregó Fuentes.

Junto a él y a Sonia Balarezo, hicieron de su profesión una forma de vivir y de afrontar la vida. La Asociación Mensajeros de la Paz tiene marcado como objetivo la promoción humana y social de los núcleos más desfavorecidos de la sociedad.

“Siempre hemos trabajado junto a él en proyectos solidarios”
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Sonia Balarezo conoció a Julio Millán en su país, cuando él estaba en su etapa de misionero, hace más de 32 años. Comenzaron a trabajar juntos en un proyecto comunitario de salud en Nabón, donde Millán estaba encargado de la parroquia y ejercía de sacerdote y, que además, hacía labores médicas en dicha comunidad.

“Posteriormente, cuando Millán regresó a España continuamos trabajando en distintos proyectos solidarios, con la Asociación Mensajeros de la Paz, durante diferentes etapas, pero siempre en causas humanitarias, que determinaron una forma de vivir en nuestras vidas”, manifestó Balarezo a este diario.

Actualmente, ella reside en Jaén desde hace casi tres décadas y trabaja en la prisión de Córdoba como médico de los internos. Colabora desde siempre con Mensajeros de la Paz y viajó junto a la expedición, que encabezó Millán, para atender a enfermos en un nuevo centro de salud de Haití.