Dios salve a la Reina: 25 años de la muerte de Freddie Mercury

El 23 de noviembre de 1991 Freddie Mercury decidió hacer pública su enfermedad

24 nov 2016 / 17:03 H.

Era 9 de agosto de 1986. La banda “Queen” desafiaba a la lógica con lo que ahora se conoce como uno de los mayores conciertos de la historia. Más de 120.000 personas abarrotaban el Knebworth Park del norte de Londres con Freddie Mercury plantado en mitad del escenario vistiendo su corona y su capa mirando a la multitud mientras Bryan May interpretaba su versión del “God save the Queen”, algo que se había convertido en una costumbre del grupo a la hora de cerrar las actuaciones. Un punto final que entonces parecía solo el salto hacia otro párrafo.

Y es que ya a finales de 1986 la prensa comenzó a especular después de descubrir que Mercury se había hecho la prueba del sida en una clínica cercana a su casa en Garden Lodge, en el barrio londinense de Kensington. Lamentablemente, las informaciones no iban desencaminadas y el cantante fue oficialmente diagnosticado con la enfermedad en la primavera de 1987.

Comenzaba así la época más hermética de su vida. La primera consecuencia fue que nunca volvería a cantar con Queen, dejando los conciertos y centrándose en el trabajo de estudio grabando aún su segundo disco en solitario (1988, Barcelona, con su mítico dueto con Montserrat Caballé) y otros dos con el grupo (1989 y 1991), más otro póstumo que se editó en 1995, cuatro años después de su muerte.

Fue el 23 de noviembre de 1991 cuando Freddie Mercury decidió hacer pública su enfermedad a través de un comunicado que leería el publicista de Queen, Roxy Meade.

“Como consecuencia de las conjeturas aparecidas en la prensa en las dos últimas semanas, es mi deseo confirmar que me he hecho las pruebas de VIH y tengo sida. Creo que ha sido conveniente el mantener esta información en secreto para proteger la intimidad de los que me rodean”

“Ha llegado el momento de que mis amigos y mis fans de todo el mundo sepan la verdad y espero que todos se unan con mis doctores y aquellos que luchan contra esta terrible enfermedad. Mi intimidad siempre ha sido algo especial para mí y soy conocido por las pocas entrevistas que concedo. Por favor, comprended que esta pauta continuará”.

Apenas 24 horas después de hacer pública su enfermedad, Freddie Mercury fallecía en su casa de Garden Lodge, acompañado por Jim Hutton, Peter Freestone y David Clarke. La causa oficial, una bronconeumonía agravada por el sida. La noticia se conocía a primeras horas de la mañana del 25 de noviembre provocando una conmoción global inmediata.

Mucha gente ha colgado a Mercury la etiqueta de mejor vocalista de la historia, y es que, no es para menos si echamos un vistazo a sus registro. Desde el rock mas puro a la balada más cautivadora, Freddie Mercury ha dejado un legado musical que perdura desde entonces, y es que, como él mismo decía: “No seré una estrella del rock, seré una leyenda”.