Coque Malla: “Espero que el público jiennense acuda de manera pura y espontánea, sin expectativas”
El cantante hace la tercera parada de su gira “Un piano, un pianista y yo” en la capital, este jueves
LA ENTREVISTA
Jueves, 21:00 horas, Teatro Infanta Leonor. Todo está preparado para que los jiennenses puedan vivir una noche única de la mano de uno de los puntales de la música nacional. La gira “Un piano, un pianista y yo” recala en la capital de la mano de Coque Malla y el pianista David Lads, un espectáculo donde la voz cobra el protagonismo que merece en el escenario sin renunciar a nada más. La historia comenzó durante las firmas de discos de la promoción de “Aunque estemos muertos”, donde ambos artistas descubrieron la pasión por los directos con unos conciertos a piano y voz.
—Tercera parada de la gira “Un piano, un pianista y yo”. ¿Qué significa para usted estar en Jaén?
—Espero que sea un gran concierto, hace mucho que no vamos a Jaén. Es el tercero de esta gira que, de momento, nos está dando muchas satisfacciones, porque llevamos todo un año con un montaje muy grande, con la banda, pantallas visuales, luces... y, de repente, volver a la esencia es muy excitante.
—¿Qué quiere decir con “volver a la esencia”?
—Volver a la pureza de la canción y a disfrutar de un instrumento único como es la voz.
—¿Recuerda la última vez que tuvo un concierto en Jaén?
—No paro de tocar y me pierdo, la verdad es que me dan vueltas las ciudades. Sé que a la provincia no hace tanto tiempo, pero a la capital, muchísimo.
—¿Qué espera del público?
—Como siempre, no espero nada, nunca voy a un concierto esperando algo de la gente, por eso me gusta tanto mi profesión, porque lo que pasa es lo que ocurre en el momento y la conexión se produce por razones misteriosas.
—¿Y qué puede esperar el público jiennense?
—Espero que vayan de una forma pura y espontánea, sin expectativas. Lo que se van a encontrar es a dos músicos haciendo canciones y llevándolas a su origen, al estado puro de donde nacieron. Van a escuchar las canciones deseadas por todos, pero también bastantes rarezas que no solemos tocar y que este formato permite rescatar.
—¿Qué conoce de Jaén?
—Conozco poco, la verdad, no es una ciudad que haya visitado mucho. Tenemos ahora un vínculo, porque la empresa de sonido que trabaja con nosotros en esta gira es de Jaén, así que espero que me lleven por ahí a conocerla mejor.
—¿Se siente más protagonista en el escenario de un teatro?
—No, el protagonista del espectáculo es la canción, ese es el punto de partida, pero luego hay más protagonistas. Creo que los buenos compositores y los buenos cantantes no deben perder esto nunca de vista, estamos totalmente al servicio de la canción, esa es nuestra jefa.
—¿Qué tiene de vitalidad la gira en la que está inmerso?
—Tiene la vitalidad de una banda de rock tocando algo que sienten y que, por lo tanto, provoca emoción. La música es vitalidad y, como todos los discos, hay mucha.
—¿Ha descubierto algo de sí mismo en este nuevo trabajo?
—Sí, en todos los discos, pero es difícil de analizar. Supongo que he descubierto que, cuando compuse el disco, estaba en una fase en la que me preocupaba mucho el paso del tiempo. Creo que, a partir de una edad, es lógico que nos planteemos el paso del tiempo de una manera diferente a cuando teníamos veinte años.
—La gente le toma ya en serio como solista, pero le siguen pidiendo canciones de Los Ronaldos. ¿Le molesta?
—Yo creo que en mis conciertos de solista no hay una demanda especial. Si yo voy por la calle y a mí me conocen, sí, pero los que van a los conciertos saben a lo que van, y si de repente cae una canción de Los Ronaldos es una fiesta, pero no es ese el motivo por el que se llena el espectáculo.
—¿Cuál es el tema que siempre le gusta llevar a sus conciertos?
—No, no hay uno, sino varios que siempre están, como La Señal, La Carta, Me dejó marchar, Berlín, No puedo vivir sin ti...
—¿Continúa desconectado de la actualidad?
—La realidad muchas veces se mete hasta en lo más profundo de tu intimidad y resulta imposible escapar de ella, porque son de mucha importancia, como la tragedia de Valencia o las elecciones de Estados Unidos, pero eso hay que desgranarlo, leer de varias fuentes para enterarte de lo que está ocurriendo. Me llegan los titulares, pero yo no investigo después.
—¿Qué le aporta el cine?
—Acabo de rodar una película que se llama “Buscando a Coque”, basada en mi personaje, pero en cuanto estoy diez minutos sin subirme a un escenario lo echo de menos muchísimo. Sin el cine puedo vivir tranquilamente, aunque de vez en cuanto me alegra mucho volver a un plató.
—¿Algún proyecto?
—Sí, hay un proyecto teatral para el año que viene, en el que participo, pero no es mío, por lo que no tengo permiso para contarlo.
—¿Hay alguien que no pueda vivir sin ti?
—Espero que sí, espero que mi familia... Yo desde luego no puedo vivir sin ellos.