Cazorla ya vive envuelta en los sonidos del blues

Regresa BluesCazorla durante todo el fin de semana y conciertos en tres escenarios distintos

08 jul 2022 / 09:50 H.
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Desde donde nace el “Misisipi” jiennense, el Guadalquivir es testigo año tras año de un festival que, por derecho propio, es uno de los más relevantes por conseguir que durante un fin de semana Cazorla sea epicentro de música, de rock, de jazz, de blues. La música negra en su máximo esplendor y con fuertes toques de folk y country en según que artistas que suben al escenario dispuesto a hacer que el público disfrute y vibre durante tres intensos días. Y este año no podía ser menos. El BluesCazorla regresa y lo hace con la mejor de las intenciones y con el objetivo de hacer que cazorleños y visitante bailen, canten y disfruten de espectáculos muy especiales en los que la música es la protagonista.

Unas veladas que desde que el sol se esconde comienzan, pero que desde mucho antes ya están más que iniciadas ante el ambiente que se respira en sus calles, las miles de personas que pasan por sus calles y un público ávido y con ganas de música. “En el año 1994 empezaba la primera edición de una locura, de algo raro. Alguien entendió que el Guadalquivir podía convertirse en el Misisipi y Cazorla podía ser Memphis. Desde entonces nació BluesCazorla y año a año ha ido creciendo hasta llegar al día de hoy”, señaló Antonio José Rodríguez, alcalde de Cazorla.

<i>Juan Ruiz, María Rivera, Francisco Javier Lozano, Francisco Reyes, Antonio José Rodríguez, Carlos Espinosa, Noelia Martínez, José Luis Olivares, Nuria Serrano y Ana del Castillo. / Fran Miranda / Diario JAÉN</i>
Juan Ruiz, María Rivera, Francisco Javier Lozano, Francisco Reyes, Antonio José Rodríguez, Carlos Espinosa, Noelia Martínez, José Luis Olivares, Nuria Serrano y Ana del Castillo. / Fran Miranda / Diario JAÉN

Por su parte, Carlos Espinosa, director del festival, señaló lo complicado de preparar esta edición tras varios años difíciles en los que no se disfrutó del festival de la forma adecuada por culpa de la pandemia. “Era complicado recuperar la tranquilidad y la normalidad porque cuando volvemos a diseñar el cartel de este año teníamos multitud de incertidumbres. Creo que, al final, afortunadamente hemos logrado conseguir un cartel de calado y eso no siempre es fácil”, reconoció durante la presentación del festival cazorleño.

El presidente de la Diputación de Jaén, Francisco Reyes, acompañado por el diputado de Promoción y Turismo, Francisco Javier Lozano, inauguró junto al alcalde de Cazorla, Antonio José Rodríguez, y al director del BluesCazorla, Carlos Espinosa, este festival que forma parte de la acción promocional “Jaén en julio” que impulsa la Administración provincial y que se celebra hasta el 9 de julio con una treintena de conciertos. “Arrancan tres días de encuentro, de convivencia, pero sobre todo de música y de disfrute de un entorno que es único, este precioso municipio de Cazorla y este Parque Natural de las Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas que es referente de nuestro paraíso interior”, destacó Reyes en la presentación.

<i>Richard Ray Farrel durante su actuación, en acústico. / Fran Miranda / Diario JAÉN.</i>
Richard Ray Farrel durante su actuación, en acústico. / Fran Miranda / Diario JAÉN.

BluesCazorla, segunda parada de “Jaén en julio”, es uno de los festivales de mayor relevancia en su género a nivel nacional e internacional. En esta edición retoma sus tres escenarios, en la Plaza de Toros de esta municipio, el Auditorio del Parque de Santo Cristo y la Plaza de Santa María, con un cartel en el que figuran importantes bandas y artistas internacionales como Samantha Fish, Lehmanss Brothers, Raimundo Amador o Alexis Evans. La Diputación de Jaén es una de las principales patrocinadores de este evento que genera una repercusión económica estimada en Cazorla de 2 millones de euros. “BluesCazorla es una pieza fundamental de la iniciativa Jaén en julio, que se ha convertido en una alternativa al sol y la playa, una gran opción para elegir Jaén durante el verano y disfrutar de un paraíso interior que se convierte en un escenario al aire libre de casi 14.000 metros cuadrados en el que disfrutar de artistas de distintos estilos”, añadió Francisco Reyes de un festival que con tres décadas vuelve a poner vida a una pequeña ciudad sureña llamada Cazorla.

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