Capaz de revolucionar tu mundo en el “EnSueña Jaén 6”

En el mundo tan llamativo actualmente de la música y de los Djs, hay artistas que van más allá de ser meros creadores de sonidos: son artistas que se convierten en arquitectos de emociones, magos que conjuran atmósferas extraordinarias y maestros que guían nuestros sentimientos a través de sus mezclas. Son artistas que nos hacen, literalmente, vibrar.

Desde que se empieza a salir de fiesta, la figura del Dj está muy presente en esas noches de bailes hasta el amanecer y de cantar hasta quedarnos roncos. Es curioso porque existe la falsa creencia de que cualquiera puede serlo. Se suele pensar que “poner música es fácil, eso lo puede hacer cualquier persona”, sí, eso es cierto. Pero ¿puede cualquier persona poner la canción exacta que te ayude a sumergirte en un universo paralelo donde el tiempo se desvanece y las emociones, simplemente, fluyen con libertad?

Ya te digo yo la respuesta: no. Y eso es precisamente lo que hace y transmite Fran Requena cada vez que pone música. Tiene la maravillosa capacidad de saber leer a las personas, de conocer el momento exacto en el que poner esa canción que hace que todo tu mundo se revolucione, que sientas esa fuerza en tu interior que te da el poder y la libertad de bailar hasta que te duelan los pies y de gritar a pleno pulmón. Te hace sentir adrenalina, te quita cualquier pena y te hace querer comerte el mundo.

Lo cierto es que se me hace bastante raro hablar de Fran así, como un artista o una persona ajena. Quién me iba a decir a mí cuando lo conocí en esta misma redacción, ya no que tendría que escribir un artículo sobre él muchos años después, sino que seguiría aguantándolo.

A día de hoy y después de tantas veces acompañando a Fran en muchas de sus sesiones, tengo la certeza de que el talento de un Dj no radica solo en su habilidad técnica, sino también en su capacidad para entender a las personas y despertar sensaciones únicas en ellas. Él lo hace a la perfección y es algo que me sigue sorprendiendo cada vez que voy con él. Es una capacidad que lleva innata y que lo convierte en uno de los mejores de la provincia y, si me permitís decirlo, hasta de Andalucía.

No todo es bonito, esto también es cierto. Tener a Fran fuera de casa prácticamente todos los fines de semana es un reto. Las despedidas se hacen rutina y el silencio puede ser agotador. Sin embargo, verlo regresar, con esa chispa en los ojos después de cada sesión, me recuerda por qué vale la pena. Aunque los domingos cada vez se le hacen más cuesta arriba, que los años pasan para todos. Su pasión por la música, divertirse en todo momento y hacer feliz a la gente con ella trasciende cualquier sacrificio para él y eso lo respeto más que nada. Es esa energía, ese amor por lo que hace, lo que nos une y hace que cada momento juntos sea aún más especial.

No sabía si debía escribir este artículo, lo primero que he pensado es que no podía ser objetiva, pero he entendido que no va de eso, si no de dar a conocer lo gran artista que es, pero también la increíble persona que hay detrás, esa persona con la que comparto todo a día de hoy. Ojalá tengáis la oportunidad de conocerlo como yo, porque os aseguro que merece la pena, además, seguro que os espera ya con una cerveza y alguna de sus interminables historias.

Leía estos días en estas mismas páginas que con Fran nunca sabías cómo podía terminar una noche y la verdad es que muchas veces he compartido preocupaciones con Charo, su mamá, pero con el paso del tiempo y tras meterme de lleno en todos sus círculos me he dado cuenta de que la noche no solo son peligros y excesos. Existen personas maravillosas a las que hoy tengo suerte de poder llamar amigos y todo eso lo ha conseguido Fran. No sé muy bien cómo explicarlo, pero tiene ese mismo poder de atracción dentro y fuera de una pista y estoy segura de que todos los que conocen saben a lo que me refiero. Esa sonrisa que te dedica cuando lo necesitas o las palabras exactas en el momento justo para que todo cambie.

No nos ha querido contar nada sobre lo que ha preparado para este EnSueña Jaén 6, de hecho, crea cierto misticismo al respecto cada vez que alguien le pregunta. Tras verlo estos últimos días creo que está más nervioso que cuando ha tenido que actuar en festivales llenos de gente, pero también está abrumado por la ilusión y me alegra muchísimo poder aportar mi granito de arena. Solo espero que nos sorprenda como siempre hace.

En un mundo donde la música a menudo se consume de manera efímera, ese mundo del que tanto se queja Fran con eso de “las canciones ya duran menos de un mes, no hay nada nuevo que sea bueno”, se necesitan más Djs como él, que recuerden la profundidad y el significado que la música puede llegar a alcanzar en determinados momentos. Él no se limita solo a “poner música”, sino a crear una comunidad en la pista en la que todos se unen por un objetivo común: simplemente disfrutar.

Fran Requena es esa clase de Dj que, cuando lo escuchas, te recuerda que la vida es mucho más bonita y llevadera si la vives bailando.