Aderezado con un ligero toque mágico
David Uclés ofrece un punto de vista distinto sobre la Guerra Civil española
LA ENTREVISTA
Natural de Úbeda, David Uclés es traductor, dibujante, músico y, además, escritor. Recientemente ha publicado su nueva novela: La península de las casas vacías. Este relato sigue la historia de una familia de olivareros que por una serie de circunstancias acabará dispersándose en la España de la Guerra Civil, durante la Segunda República y la posguerra. Una obra llena de crudeza a la par que realismo mágico.
—¿Qué le atrajo de la traducción?
—Sentía cierta vocación por las artes, pero no quería estudiarlas de forma profesional. Quería algo más práctico para mi día a día. Me interesé por la traducción. Era algo que podía enriquecerme. Pude aprender varios idiomas como inglés, francés y alemán.
—¿Cuándo comenzó a interesarse por la escritura?
—Desde muy joven, pero jamás tuve afán de ser escritor. Cuando tenía unos 9 o 10 años escribí una historia a máquina. De adolescente escribí un libro que solo vieron familiares y amigos. Es a los 20 años, cuando quise escribir. Soy un gran lector y uno acaba queriendo imitar lo que consume.
—¿De qué trata “La Península de las Casas Vacías”?
—Es la historia de una familia durante la Guerra Civil pero llena de realismo mágico. Habitan en Jándula, un pueblo imaginario basado en Quesada. Se separarán y vivirán distintas situaciones. Me inspiro en muchas historias que me contaba mi abuelo.
—¿Por qué el realismo mágico?
—Es un estilo en el que me siento cómodo. En mis anteriores novelas también aparecían elementos así. La Guerra Civil es posiblemente el tema sobre el que más se ha escrito, en nuestro país. Quería darle un toque distintivo. El realismo mágico permite plasmar situaciones cotidianas con un aire onírico. Creo que eso puede resultar interesante y atrayente.
—¿Por qué la Guerra Civil?
—Hasta hace unos años no me interesó escribir sobre ella. Cuando empecé la escritura del libro era un compendio de historias que me contaba mi abuelo. Si en vez de la guerra me hubiese contado cosas sobre la postguerra o la transición, el libro sería muy distinto. Quiero conservar su memoria.
—¿Cree que hay desinformación sobre este periodo?
—Bastante. Recuerdo que cuando estudiaba en el instituto la Guerra Civil apenas ocupaba unas páginas. Temas que ocurrieron hace siglos tenían mucho más espacio. Hay un tabú generalizado.
—¿Algún proyecto futuro?
—Estoy escribiendo una novela sobre alguien que pasa 24 horas en Barcelona cuando desaparece toda luz existente, incluida la solar.