La “bichota” Karol G arrasa en el Santiago Bernabéu
Los 65.000 asistentes al concierto iban ataviados de rosa y repletos de energía para bailar a ritmo de la colombiana

La cantante Karol G (Medellín, 33 años) ha conquistado este sábado el Santiago Bernabéu con su gira “Mañana será bonito” en el primero de sus cuatro días sold out. Conocida como una de las precursoras del reggaetón con letras que reivindican a las mujeres y no hacen alusión a términos sexistas, ha conseguido lo que nadie hasta ahora: llenar cuatro citas consecutivas en el estadio madridista con 240.000 tickets vendidos. Con un repertorio conformado por más treinta canciones, divididas en tres sets, Karol G dio el pistoletazo de salida con TQG, en colaboración con Shakira. Un concierto marcado por las animaciones de “Carolina”, acompañado de sirenas y animales hinchables sobre el escenario, así como fuego y bailes enérgicos. Besties, Mi cama y El barco resonaron seguidamente en el estadio, esta última, una de las piezas favoritas de Karol G, tal y como destacaba ante sus fans. X si volvemos, todo un éxito cantado junto a Romeo Santos, que finalizó con un “hoy es noche de sexo y voy a cumplir tu fantasía”.
“Se supone que fueron ustedes los que pusieron como número uno la próxima canción”, anunciaba Karol G antes de interpretar su siguiente hit, nada más y nada menos que Tusa. Un exitazo que se hizo viral durante la pandemia y que hizo en colaboración con Nicki Minaj. BichotaG también levantó al público de las gradas, una de sus canciones más famosas y recientes, que simboliza el fenómeno de masas en el que se ha convertido a nivel mundial, ser “una bichota” ya tiene su propio significado. “Se la dedico a todas las reinas mamasotas”, anunciaba Karol G antes de la misma. Con su “salgo acicala’ de pie’ a tope” retumbaba el Bernabéu, para acto seguido pasar a El Makinon, otra de las piezas favoritas del público, ataviado de vestimentas rosas, purpurina y sombreros de cowboy que seguían la mismas tonalidad y estilo. Con la canción Carolina la artista descubría a su público su nombre: “Mucho gusto, me llamo Carolina”, decía irónica. “Sé que en España les encanta el perreito, vamos a poner como que estamos en una discoteca”, aseguraba la artista antes de cantar Gatúbela, que interpreta originariamente con Edwin Vázquez Vega, un hit que rompió con la estética que tuvo el concierto hasta entonces. De este modo, los colores pastel que predominan en el disco (Mañana será bonito, 2023) y que marcó el inicio del concierto dieron paso a un rojo pasión que iluminó el escenario. En ese momento, fue cuando interpretó una de sus canciones más antiguas, A ella de 2017, para después entonar TA OK, OCEAN, Pero tú y Mercurio.
“Hay una bichota en cada una de ustedes”
El tercer set fue inaugurado con otro de sus vídeos animados en los que sale Carolina y con el que anima a las mujeres a empoderarse: “Hay una bichota en cada una de ustedes, tienen que encontrarla como hizo Carolina”. Tampoco faltó su nuevo single Si antes te hubiera conocido, canción que no aparecía en el repertorio pero que la artista colombiana regaló a los 65.000 asistentes de este sábado: “Nunca la he cantado en España”. Mi ex tenía razón ha sido otra de las canciones con las que el público más se ha identificado. Todos la cantaron al unísono junto con la artista, quien posó en solitario en el extremo de la pasarela, en forma de flor, y cantó con uno de los atuendos protagonistas del concierto, el sombrero. En ese momento, Karol G se mimetizó con sus fans, que en su mayoría llevaban el famoso sombrero de cowboy que aparece en el videoclip de esta canción. Karol G –quien tiene tres álbumes (Unstoppable, 2017) (Ocean, 2019), (KG0516, 2021) y (Mañana será bonito, 2023)– ha cerrado este primer día de conciertos en Madrid con Mamiii y Provenza o S91. Este último reza “quieren ser como yo, ya los vi pero el flow no está a la venta”, incorporado al repertorio expresamente por ser “España”. “La guardé para aquí”, apostillaba la artista antes de cantarla. También sorprendió al público cuando sacó una bandera de España y se la puso sobre los hombros, no sin antes saludar a sus compatriotas, muy numerosos en el concierto.