Los escolares viven su romería
El colegio Isidoro Vilaplana reúne un año más a todos los centros educativos
Los más pequeños viven su día grande. El centro educativo Isidoro Vilaplana celebró, en la mañana de ayer, su tradicional Romería Escolar. En su décima novena edición, la actividad educativa contó con un simbólico centro escolar invitado, proveniente desde Colomera (Granada). Fue el colegio Juan Alonso de Rivas, que trasladó a sus alumnos hasta Andújar para participar en el evento.
Las fiestas para los jóvenes comenzaron en la jornada del lunes con la celebración, en el Teatro Principal, del Pregón Infantil, a cargo de la alumna del colegio Ruiz de Gordoa, Lucía Jurado, quien, con su corta edad, pronunció una emotiva exaltación a la Virgen de la Cabeza y los días grandes de la ciudad. De igual modo, el acto albergó sobre las tablas teatrales, la presentación del cartel de la Romería Escolar y la entrega de premios del concurso de dibujo para su elaboración. Para culminar esta tradicional cita, el centro organizador entregó unos recogimientos a los colegios que participan, año tras año, en la celebración de la actividad extraescolar. Asimismo, los alumnos del Colegio Cristo Rey sorprendieron con sus magistrales dotes para tremolar las banderas, que ellos mismos confeccionaron, además un grupo de jóvenes actuaron bajo la dirección de Marisa Ortega Sarriá.
El 24 de abril amaneció lluvioso y con frío, pero los cofrades y romeros más pequeños desprendían alegría, pues, desde cada uno de sus colegios, comenzaron su peregrinar hasta el centro “Isidoro Vilaplana” al son del redoble típico del tambor, palmas e, incluso, algunos con bandas de música con alegres pasodobles compuestos en honor de la Virgen de la Cabeza.
Alrededor de las diez de la mañana, el paseo de la Pontanilla era ocupado por todos los escolares, que, en orden, realizaban su entrada al patio principal del centro organizador. En la fachada del colegio, se alzaba un panel y una imagen de la Virgen de la Cabeza para realizar la ofrenda floral a la misma, además, junto a los representantes de la Cofradía Matriz, comunidad Trinitaria y Ayuntamiento, los alumnos del Isidoro Vilaplana recepcionaron a los pequeños romeros, con un deseo de vivir con felicidad la Romería.
Cerca de las once de la mañana, la comitiva alegre partía desde la instalaciones educativas, para desfilar por las calles céntricas de la ciudad. En cabeza del cortejo, dos banderas de la Hermandad Matriz y, como culmen, los representantes religiosos, civiles, cofrades y educativos. Todos los niños que cursan Primaria en la ciudad, participaron en el desfile, por lo que el mismo ocupó varias calles a su paso. Algunos de los momentos más emotivos de la jornada, fue el paso por el popular “Cuadro de la Virgen”, donde niños y mayores se persignaron e hicieron distintos saludos con sus propias insignias e, incluso, tremolaron las banderas ante el cuadro.
De igual modo, la Ermita de la Virgen de la Cabeza, alzada en la calle Ollerías, fue testigo del prometedor futuro romero con el que la ciudad cuenta. De hecho, al pasar por delante de sus puertas, los niños lazaron sus más emotivos “vivas” a la patrona andujareña, La Morenita.