El desaparecido convento de “Nuestra Señora de la Peña” en Orcera

28 abr 2021 / 09:10 H.
Ver comentarios

La Virgen de la Peña

En la 2ª publicación de nuestro viaje describimos la Iglesia Parroquial de “Nuestra Señora del Collado” de Segura de la Sierra. Cuando describimos la imaginería del templo decíamos literalmente: “... El templo de Ntra. Señora del Collado alberga una serie de imágenes propias de esta iglesia y otras procedentes de la ermita, ya desaparecida, de “San isidro” de la aldea de Cañada Chica en los Huecos de Bañares y otras del extinto monasterio franciscano de “Santa María de la Peña” de Orcera, que después de la desamortización de Mendizábal fueron acogidas en Segura. Como imagen más destacada por su antigüedad, está la “Virgen de la Peña...”

La escultura de la Virgen de la Peña es de autor anónimo del siglo XIV de estilo gótico. Es de alabastro policromado sobre un capitel árabe. Esta imagen procedía del antiguo monasterio – convento franciscano ya desaparecido: “Santa María de la Peña” en el pueblo de Orcera. De su procedencia hay varias versiones. Una de ellas que se le apareció enterrada a un hortelano cuando estaba labrando la tierra cerca del manantial y de ahí su nombre de “La Peña”. Otra, que creo que es la más verosímil, que llegó con las tropas cristianas que conquistaron la plaza a los moros y se quedó en la ermita. De esto ya hay referencia con la Virgen de la Antigua que se venera en la Catedral de Jaén y que traía consigo Fernando III el Santo cuando conquistó Jaén.

El Monasterio o Convento de Santa María de la Peña

Con todos los años que llevo en Segura, fue la primera vez que oí hablar del Monasterio o Convento de Santa María de la Peña que estaba en Orcera.

Empecé hacer averiguaciones sobre el convento. ¿Dónde se encontraba? ¿Qué quedada de él? ¿Quién lo fundó?, y así muchas más preguntas que me hice. Averigüé que este convento estaba en el solar que actualmente ocupa la plaza de toros de Orcera y que sus piedras sirvieron para hacer está. Que su fachada se recuperó y que en 1817 se trasladó y colocó en la fachada de la iglesia parroquial Nuestra Señora de la Asunción de Orcera, pero poco más.

<i>Retablo de la iglesia parroquial Ntra. Señora de la Asunción en Orcera, procedente del monasterio – convento franciscano de Ntra. Señora de la Peña.</i>
Retablo de la iglesia parroquial Ntra. Señora de la Asunción en Orcera, procedente del monasterio – convento franciscano de Ntra. Señora de la Peña.

Como este mundo es un pañuelo, unos pocos días después hablando en el rellano de la escalera de este tema con mi vecino D. Antonio Aranda Calvo, para más señas Canónigo de la Sta. Iglesia Catedral de Jaén y Capellán del Santuario de Nuestro Padre Jesús Nazareno (El Abuelo). Me dijo que él fue en su juventud párroco de Orcera y que había escrito en algunas ocasiones sobre el Convento de Santa María de la Peña, dejándome para su estudio y su utilización las citadas publicaciones. Ahora si tenía ya documentación para afrontar esta nueva publicación.

Un poco de historia

Antes de entrar de lleno en el tema principal que es el convento, quiero hacer algunas aclaraciones que nos ayudarán a entender la vida de los frailes Franciscanos y su paso por Orcera.

¿Qué son las Órdenes Mendicantes?

Después del Cuarto Concilio de Letrán es el fin del Monacato. La aparición de las órdenes mendicantes en el siglo XIII supuso una novedad extrema en el brazo regular de la Iglesia, pues el antiguo monje dedicado a los oficios litúrgicos y a la contemplación, se ve ahora sustituido por el fraile. El fraile mendicante se inserta en la sociedad, intramuros de la ciudad, para vivir los consejos evangélicos cerca de los hombres, a los que pretende ayudar como consecuencia de su vocación. Desarrolla además de la oración otras actividades: catequesis, enseñanza, predicación, asistencia hospitalaria, misiones, etc. La tarea de la predicación requería una rica preparación intelectual y un don de palabra muy especial.

¿Quiénes eran los Franciscanos?

San Francisco de Asís (1182-1226) reunía todas las virtudes propias de un fraile mendicante. Su historia y leyenda hacen de él una de las figuras medievales más características de la cultura europea, gozando de gran fama sus escritos y milagros. No podemos olvidar con respecto a esto, la amplia iconografía que despertó la vida del santo escrita por San Buenaventura, el segundo fundador de la orden. San Francisco tuvo una gran importancia en la conciencia colectiva, predicó e hizo realidad la pobreza, la humildad y el servicio a los demás, viviendo de limosna sin tener nada propio, de ahí el nombre de mendicante que recibe la orden, haciendo alusión a la mendicidad de la que dependen para sobrevivir. Esta es una de las diferencias con las órdenes monástica, que tenían numerosos bienes y percibían saneadas rentas. San Francisco era un pobre por convicción, donde todos los frailes son iguales, todos hermanos y todos visten iguales. Su indumentaria consistía en una túnica con capucha y otra sin ella si les fuera necesario, y una cuerda como cinturón. Por otro lado, la vocación de la predicación daba a la vida del franciscano un sentido itinerante, reñido con el carácter estable de las grandes fundaciones monásticas, Existió una organización territorial de estas congregaciones, que con el tiempo se compondrán de Provincias, Custodias y Conventos, así como de la existencia de una casa madre.

¿Cómo y cuándo se funda el convento de Santa María de la Peña?

En la primera mitad del siglo XVI, en el reinado del emperador Carlos, y a impulsos de su esposa Isabel de Portugal, se erigió un convento situado a extramuros del lugar de Orcera a una distancia de medio cuarto de legua, donde hay una fuente. Se dispuso que el convento fuera regentado por los frailes observantes de nuestro padre San Francisco con el título de convento o Monasterio· de Nuestra Señora de la Peña o Santa María de la Peña.

En este lugar inicialmente existía una ermita, en la que Dña. Mencía de Figueroa, madre de Jorge Manrique, estuvo enterrada y hasta 1531 no se transformó en Monasterio. Sobre la ermita hay unas anotaciones en los Libros de Visitas de la Orden de Santiago, donde aparece recogida una descripción del edificio y sus posesiones. Como datos curiosos en 1507 los visitadores de la Orden de Santiago ordenaron al mayordomo de la ermita cercar una huerta y que comprase una casulla nueva.

¿Cómo sería el edificio del Convento y su entorno?

En la actualidad no hay restos algunos de cómo sería el edificio que albergaba al convento y por ende a los frailes. Si se sabe que las piedras que formaban la estructura del mismo: cimientos, muros de carga, tapias del cercado, etc., se reciclaron utilizando sus piedras para construir la plaza de toros que existe en la actualidad en el solar que ocupaba, y también es de suponer que habrán servido a lo largo del tiempo para construir algún que otro edificio del pueblo.

<i>Vista aérea plaza de toros y parcela.</i>
Vista aérea plaza de toros y parcela.

Si nos fijamos en la vista aérea del terreno, hay tres partes bien diferenciadas. La primera la que ocupa la plaza de toros y el olivar anexo, que está a nivel. La segunda y tercera, ubicadas al margen derecho y detrás, tienen una pendiente considerable. Esto lleva a suponer que el convento estaría ubicado en la parcela a nivel, y los corrales para los animales y los huertos ocuparían las parcelas que están en pendiente, incluso estarían abancaladas para poder sembrar con facilidad: hortalizas, patatas, etc., y el agua para el riego le llegaría desde el manantial próximo por gravedad.

<i>Distribución en la parcela: convento, huertos, corrales, manantial.</i>
Distribución en la parcela: convento, huertos, corrales, manantial.

La igualdad de los franciscanos se verá reflejada en la arquitectura de sus conventos. En general se puede decir que frente a las construcciones monacales de férreos esquemas, en los conventos de frailes menores se hacen unos modelos más acomodados al medio.

Como esquema tipo de convento franciscano, se puede incluir en él:

- La Iglesia. Lugar de oración. En torno a ella se iban alzando las dependencias necesarias. Presenta una nave única, para facilitar la acústica de la predicación.

- El Claustro. Construido generalmente junto a la iglesia. Es de planta cuadrada y el centro suele haber un pozo y un pequeño jardín con cuatro caminos.

- La Biblioteca. Era donde los monjes copiaban manuscritos y libros antiguos; En las órdenes mendicantes como es nuestro caso, desaparece la figura de los monjes y aparece la de los frailes. Estos ya se inserta en la sociedad, intramuros de la ciudad, para vivir los consejos evangélicos cerca de los hombres, desarrollando además de la oración otras actividades: catequesis, enseñanza, predicación, asistencia hospitalaria, misiones, etc.

- Sala Capitular. Lugar de reunión de la comunidad, donde se leían los capítulos de la regla de la orden y donde el abad organizaba las distintas tareas.

- El Calefactorio. Lugar caldeado donde iban los monjes de vez en cuando para descansar y entrar en calor.

- El Refectorio. Era el comedor, y colindante con él estaba la cocina.

- La Bodega. Se almacenaban los alimentos, el grano, patatas, aceite.

- Las Celdas de los Monjes. Es el gran dormitorio común estaban en el piso superior.

Aparte de estas salas también habían: huertos, la enfermería, el locutorio, y a veces, establos, molinos, talleres, entre otros. Y el cementerio se encontraba siempre en el terreno monacal.

Para seguir imaginado como seria de “grande” el convento y dejando la imaginación volar, he comentado que la portada del convento cuando este ya estaba sin uso y en decadencia, se desmontó y se colocó en la fachada principal de la iglesia de Nta. Señora de la Asunción de Orcera. También he comentado que las iglesias de los franciscanos tenían una sola nave y de diseño sencillo y austero. Utilizando los datos del Castrato he “sacado” la planta de la iglesia y la he transportado a la parcela superponiéndola en la plaza de toros y se puede comprobar que entra perfectamente en ella, lo que hace suponer que probablemente la iglesia del convento tendría las mismas dimensiones de la iglesia actual en Orcera, lo que corrobora pues la portada encaja perfectamente.

<i>Encaje de la planta de la iglesia Nuestra Señora de la Asunción en la parcela actual de la plaza de toros.</i>
Encaje de la planta de la iglesia Nuestra Señora de la Asunción en la parcela actual de la plaza de toros.

¿Cómo es la portada - retablo?

La portada está inspirada en los tratados manieristas de es decir, entre el final de la arquitectura renacentista y el comienzo de la barroca. Mezcla elementos iconográficos cristianos y paganos, compagina refinamientos con arcaísmos e inserta en una clara estructura de portada retablo un atrevido barroquismo ornamental.

<i>Fachada principal de la iglesia Nuestra Señora de la Asunción en Orcera.</i>
Fachada principal de la iglesia Nuestra Señora de la Asunción en Orcera.

La soberbia portada está dividida en cuatro cuerpos.

<i>Distintos motivos iconográficos en la portada.</i>
Distintos motivos iconográficos en la portada.

En el primero, arco de medio punto sobre pilastras, con figuras alegóricas de la Fe, la Esperanza y la Caridad en las enjutas y enmarcado por dos columnas exentas de orden corintio que sostienen el entablamento con querubines en el friso.

El segundo cuerpo, una triple hornacina con la Virgen con el Niño en el centro y San Juan y Santiago a los lados, separados por atlantes.

<i>Triple hornacina con la Virgen con el niño, San Juan y Santiago a los lados, separados por atlantes.</i>
Triple hornacina con la Virgen con el niño, San Juan y Santiago a los lados, separados por atlantes.

El tercer y cuarto cuerpo, formado por un frontón triangular partido con pináculo que los sostienen figuras aladas y desnudas con cuernos.

Además de esta soberbia portada – retablo, se trasladaron también dos ventanales del mismo estilo arquitectónico. Uno se colocó en la torre del campanario anexa al templo y otro en un lateral de la nave central.

<i>Ventanal en la torre del campanario. </i>
Ventanal en la torre del campanario.

Hemos hablado que las piedras del convento se reutilizaron para construir la actual plaza de toros de Orcera y también hemos referido que cerca del convento de Ntra. Sª de la Peña había un manantial que fue el que de dio el nombre. Pues bien vamos a ver como se encuentra en la actualidad la zona.

La Plaza de Toros

El manantial

Para finalizar, comente al principio que mi vecino el sacerdote D. Antonio Aranda me facilito para su estudio y su utilización lo que había publicado en antaño sobre el convento, que transcribo tal cual.

El desaparecido convento de “Nuestra Señora de la Peña” en Orcera

Página 1ª.

El desaparecido convento de “Nuestra Señora de la Peña” en Orcera

Página 2ª.

El desaparecido convento de “Nuestra Señora de la Peña” en Orcera

Página 3ª.

El desaparecido convento de “Nuestra Señora de la Peña” en Orcera

Página 4ª.

El desaparecido convento de “Nuestra Señora de la Peña” en Orcera

Página 5ª.

Bibliografía:

­ Información escrita y verbal de D. Antonio Aranda Calvo, Sacerdote

­ Archivo General de la Región de Murcia.

­ Portal de la Dirección General del Catastro.

­ Fotos, textos, diapositivas, y maquetación: Miguel Mesa Molinos.

Viajes por el Reino de Jaén