Los legionarios regresan a la procesión de La Buena Muerte

Pueblo de Jaén: los novios de la muerte os prometen que volverán”. Son las palabras con las que, en 1985, se despidieron de la ciudad los legionarios que, durante varios años, llegaban de la mano de la Hermandad de la Buena Muerte para participar en su ya de por sí marcial procesión y, de paso, despertar la admiración de los jiennenses, que se echaban a la calle para corresponder al gesto de la cofradía.

Treinta y un años después, una nueva generación de militares toma el testigo y cumple la promesa de sus compañeros. Lo harán el próximo Miércoles Santo, para volver a acompañar al imponente Crucificado de Jacinto Higueras. Un banderín, una escuadra de gastadores y representación de mandos de la octava bandera de este singular cuerpo se desplazarán desde la base de Viator (Almería) en un número mucho más reducido que tres décadas atrás, pero con la misma capacidad de atracción de siempre. La noticia, revelada ayer por este periódico en su página web, corrió como la pólvora por los ambientes cofrades —igual que ocurría en los años 80— y las redes sociales, que registraron inmediatamente la mayoritaria satisfacción de los incondicionales de la majestuosa comitiva que sale de la Catedral.

La vinculación de este cuerpo militar —que en octubre de 2011 recibió un homenaje de la capital jiennense en un acto celebrado en la Plaza de Jaén por la Paz— con la cofradía blanquinegra viene de antiguo. Tanto, que su segundo tercio, bajo la denominación de Duque de Alba, posee el título de hermano mayor honorario. Sin embargo, la presencia de los legionarios en las procesiones de La Buena Muerte es una tradición extendida a todo el territorio nacional y que data de los años 20 del pasado siglo, cuando esta advocación se erigió en protectora y patrona de la Legión. De ahí su participación en cortejos que tienen esta devoción como titular, entre ellos el del malagueño Cristo de Mena, cita ineludible.

El colectivo sacramental jiennense atesora en su historia procesional, desde su fundación en 1926, la comparecencia del Ejército; así, la Guardia Civil, diferentes regimientos e incluso secciones actualmente desaparecidas —como los Carabineros y los húsares de la Princesa— han sido habituales de la comitiva, que este año volverá a engrandecerse, más si cabe, con la presencia de las fuerzas creadas, en 1920, por el general Millán Astray.