El Borriquillo acorta su recorrido por la lluvia
El agua hace acto de presencia y desluce el Domingo de Ramos
Las precipitaciones hicieron acto de presencia a la hora en que la Real Cofradía de la Entrada de Jesús en Jerusalén y María Santísima del Amor de Úbeda iniciaban su estación de penitencia. No obstante, a pesar de que las gotas de lluvia se hacían cada vez más persistentes, la hermandad tomó la decisión de salir a la calle. Cientos de personas se agolpaban en las puertas de la iglesia de la Santísima Trinidad para ver salir a esta cofradía, conocida popularmente en la ciudad como El Borriquillo.
Los penitentes portaron su tradicionales palmas en recuerdo de tan insigne momento bíblico, algunas de ellas adornadas con filigranas y elaborados trenzados. El agua, que arreciaba por momentos, hizo finalmente que la hermandad ubetense optara por acortar el recorrido de manera que tras subir por la calle Real se encerraron en el templo que horas antes les veía salir.