Aumenta la nómina de hermanos en Caridad y Salud

Curso tranquilo. Después del estreno el año pasado del paso de misterio, la hermandad de Caridad y Salud afronta un periodo transitorio dado que continúa inmerso en la confección del único paso con el que procesiona hasta ahora. “Después de empezar con el paso de misterio, ahora no tenemos plazo para seguir avanzando en este proyecto”, apuntó el hermano mayor de la corporación, Javier Molina.

Esta hermandad cumplirá este año su cuarta estación de penitencia después de que se creara como hermandad en 2012. Desde hace tres años la cofradía se encuentra en la iglesia de Santa María Madre de la Iglesia, ubicada junto a la urbanización Azahar, cerca del barrio de Las Fuentezuelas. Una zona que a lo largo del año se ha volcado con la cofradía: “Lo que más me alegra es el aumento del número de hermanos, pues hemos pasado de 120 a 210 en prácticamente un año”, destaca Molina.

Es un síntoma de que la hermandad sigue un crecimiento pausado, con los pies en el suelo. Tras el gran salto que supuso sacar por primera vez el misterio, este año la única novedad de esta cofradía será el nuevo abrigo, de color verde, que vista la imagen de Caifás. Una prenda que ha recibido la cofradía mediante una donación anónima.

Molina afronta su segunda estación de penitencia como hermano mayor con buenas sensaciones: “He visto a la gente muy involucrada con la cofradía, se está trabajando mucho y otro aspecto destacable es que el número de costaleros se ha mantenido incluso con un leve incremento; tenemos en torno a 82 costaleros y otra cuadrilla de 53 costaleras”.

Otra de las ilusiones que tiene esta joven hermandad es el proyecto del paso de palio para la Virgen de la Salud. “Es la primera imagen que vino y sobre la que orquesta todo el sentido de la cofradía; de hecho mi deseo es presentar un proyecto para el palio antes de que finalice mi periodo como hermano mayor, que finaliza el próximo año”, reconoce el hermano mayor de la corporación.

El paso de Nuestro Padre Jesús de la Caridad ante Caifás irá acompañado por tercer año consecutivo, por la banda de cornetas y tambores Monte Calvario de Martos. “Estamos contentos con ellos, cuando salí elegido como hermano mayor, renové el contrato con esta agrupación para todo mi mandato”, sentencia Molina. La cofradía cuenta los días para enseñar su crecimiento pausado.