El más joven de la provincia
Vestigios de un rico pasado romano al calor de la bella serranía segureña
Unido a la nacional 322, este municipio de la Sierra de Segura, se enclava en la entrada al Parque Natural de la Sierra de Segura. Arroyo del Ojanco es el más joven de los 97 pueblos y ciudades jiennenses, ya que pertenecía a Beas de Segura hasta 2001. Pese a su juventud, su actual núcleo de población data de finales del siglo XIX, aunque nos remontamos hasta la edad de piedra, con restos en las inmediaciones de influencia del municipio. Las Ventas y Arroyo de los Ancos, fueron algunos de los apelativos que por aquellos entonces denominaron al pueblo. Una plantación de olivos descubrió una gran villa romana en el Cortijo de los Baños, yacimiento objeto en su día de una excavación de urgencia, cuyo resultado demostró la existencia de otros horizontes culturales entre el Calcolítico y el Bronce Antiguo, si bien el más significativo es el correspondiente a una villa romana de época bajoimperial dedicada a la explotación agropecuaria. Después, se produce una reestructuración con la construcción de nuevos edificios y pavimentos. Una tercera fase desde el punto de vista histórico es la denominada como Baños III, bajomedieval, que se prolonga hasta el siglo IV, y a la que corresponden las estructuras de una gran villa con unos extraordinarios mosaicos correspondientes al área señorial de un asentamiento de marcado carácter agrícola. Hoy, el yacimiento está protegido por una cubierta de tierra depositada tras las excavaciones.
Arroyo del Ojanco seduce a todo el que pasa por su gran vía de comunicación. En abril abre los brazos con sus fiestas de San Marcos, en honor a la figura del toro, que permiten ver el trato hacia un animal que recorre sus calles engalanado y venerado por sus vecinos. 7 de julio, otra de las fechas señaladas, recuerda el aniversario de la constitución del Ayuntamiento y el parque San Francisco es el lugar de reunión para esa fecha tan emblemática. En agosto se rinde homenaje a los visitantes estivales con actividades; así el encuentro de las familias en verano hace que esta fiesta esté llena de emociones. Llega el 4 de octubre y se vuelve a engalanar para acompañar en procesión a su patrón, san Francisco de Asís.
Un gran colectivo en el pueblo es sin duda la Hermandad de San Marcos, que organizan las fiestas con más afluencia de público y visitantes, la fiesta del toro ensogado. Cada año son miles de aficionados al toro venidos desde fuera los que disfrutan de esta fiesta taurina.