Allí donde la vida es apacible

Fue en el siglo XVIII sede del Ministerio de la Marina, que expolió la madera de la zona

24 mar 2016 / 09:20 H.

Excepto por poniente, que es hacia donde se extiende principalmente el olivar, saltando el Cerro del Pavo, Orcera está rodeada de montes más de pinar que de encinas y robles, entre Peñorta, que la cobija de los vientos del norte; Picorzo y Segura de la Sierra por el este; siempre de cara, al sureste, el Yelmo, monte protector y enigmático. Y hacia el sur, a lo lejos, de lleno, la Sierra de las Villas.

Los asentamiento humanos progresivos desde el siglo II a.d.n.e. buscaban amparo, agua, pastos para el ganado, madera, miel, cal, caza y, sobre todo, independencia, de ahí la gran cantidad de fortificaciones construidas durante la época islámica ante el peligro, primero del poder califal y, luego, de la presión cristiana. Orcera se convirtió, pues, en alquería —zona de aprovechamiento agrario y ganadero— de Segura, a la que seguiría perteneciendo como arrabal tras la ocupación y colonización de las tropas de la Orden de Santiago, que impusieron su gobierno sobre tierras, animales y personas a partir del siglo XIII. La esposa y uno de los hijos del comendador Rodrigo Manrique (padre de Jorge), estuvieron enterrados, tras su muerte —es obvio— en el Convento de Franciscanos —donde en la actualidad se levanta la Plaza de Toros—, cuya portada, tras las desamortizaciones del XIX, fue trasladada como fachada de la Iglesia actual, con factura de la escuela de Vandelvira.

En el siglo XVIII, Orcera fue sede del Ministerio de Marina, dedicado a expoliar la madera para uso de la armada real. Un espacio temático, ubicado en el edificio del Ayuntamiento, reúne piezas e información muy valiosos e interesantes que resultan esenciales para comprender el proceso social, económico y cultural de este municipio, que en 1833, como el resto de su comarca, deja de pertenecer al reino de Murcia para ocupar el extremo nordeste de Andalucía.

Aquí la vida es apacible y amigable, si uno así lo quiere. Y así parece que sus gentes lo desean. Las mujeres que aparecen en la fotografía pertenecen a los grupos de aeróbic, pilates y gimnasia de mayores, que el Ayuntamiento del municipio de Orcera lleva apoyando como actividad municipal desde el año 1990, con la colaboración del Centro de Mayores.