Salvavidas en forma de línea de subvención anti aranceles

Mensajes directos a la Junta para que “hiciera algo” por complementar las medidas que desde el Ejecutivo de Sánchez se preparaban para hacer frente al “arancelazo” de Trump. Dicho y hecho, la Administración autonómica, presidida por Juan Manuel Moreno, estudia abrir una línea de financiación para “lanzar un salvavidas” a los afectados por las nuevas tasas estadounidenses.

En este sentido, Carmen Crespo, consejera de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, hizo hincapié en que el Gobierno andaluz “está preocupado” por el posible efecto de los aranceles —impuestos ayer por Estados Unidos (EE UU)— a los productos agroalimentarios. Al respecto, resaltó que la Administración autonómica estudia posibles medidas de apoyo a los afectados como, por ejemplo, la posibilidad de abrir una línea de financiación destinada al sector afectado y sin coste alguno para los beneficiarios. Una iniciativa que, a su juicio, sirve como “aval” para los productores.

“Analizamos posibles medidas adicionales que solicitaremos a la Unión Europea (UE) y al Gobierno de España y que pondremos en marcha desde la Junta”, aseguró.

La consejera puso de relevancia que la Administración andaluza “estará a la altura de las circunstancias” y, por otra parte, lamentó que el Ejecutivo central “no haya estado de primera mano con la diplomacia activa” que la Junta pidió desde un primer momento con el fin de “evitar que los productores españoles se vieran afectados” por la medida del presidente Trump. Sin abandonar el asunto, Crespo recordó que, si bien las competencias para negociar con el Gobierno estadounidense corresponden a la UE, la Administración central española debe “interceder”. ¿Para qué? “Con el objetivo de que se escuche nuestra voz en cuanto a unos aranceles que afectan a unos productos que nada tienen que ver con esta guerra comercial”, afirmó.

Asimismo, para la consejera de Agricultura, los impuestos del 25% que se impondrán a productos agroalimentarios como el vino, el queso o el aceite de oliva son “absolutamente injustos”. Esto provocará que el precio de estos bienes en las estanterías de los supermercados estadounidenses sufra un incremento, lo que se traducirá en una bajada de las ventas, en el caso de lo que más afecta a la provincia de Jaén, de aceite de oliva. Lo mismo puede ocurrir con productos del país norteamericano si la UE juega las mismas cartas que Trump y pone impuestos a sus exportaciones. Si esto sucede, los españoles notarán en el bolsillo cómo el kétchup o los frutos secos, entre los que se encuentra uno de los que EE UU más exporta a Europa, los cacahuetes. En esta línea, la consejera recordó que el presidente de la Junta “está en primera línea de trabajo” ante esta “compleja situación”, como demuestra, para Crespo, la reunión que mantuvo la semana pasada en Bruselas con el comisario europeo de Agricultura, Phil Hogan. “El Gobierno autonómico cumplirá”, aseveró la consejera Carmen Crespo.