Refuerzo de personal sanitario en hospitales

El brote de listeriosis obliga a aumentar la atención urgente

23 ago 2019 / 08:34 H.

La Consejería de Salud y Familias reforzó el personal sanitario en los hospitales y puntos de urgencia de Sevilla, debido a la alerta sanitaria decretada desde el pasado 15 de agosto a causa del brote de listeriosis por el consumo de carne mechada de la marca “La Mechá”, que afecta ya a 161 personas en Andalucía, 131 en Sevilla (81,3%). Según indicaron fuentes del departamento que dirige Jesús Aguirre, también se reforzaron los profesionales del Hospital San Juan de Dios del Aljarafe, ubicado en Bormujos.

Así, en el Hospital Universitario Virgen del Rocío de la capital se sumaron a la plantilla dos enfermeras por turno y un auxiliar de refuerzo en urgencias, así como cinco enfermeras y cinco auxiliares para atención a embarazadas ingresadas, que ascienden a un total de 28. Por su parte, los laboratorios de microbiología se reforzaron con dos técnicos y un auxiliar de enfermería.

Igualmente, en el Hospital Universitario Virgen Macarena se contrató una enfermera más por turno, mientras que en el Virgen de Valme se sumaron dos profesionales de enfermería y dos auxiliares en cada turno. También se reforzaron las urgencias de los centros de atención primaria de Distrito Sevilla. Por su parte, en el San Juan de Dios de Bormujos hay un médico de urgencias y un técnico de laboratorio más.

Salud confirmó 29 nuevos casos de infección por Listeria monocytogenes desde el inicio de la alerta, de forma que son actualmente 161 casos detectados en toda Andalucía. El número de pacientes hospitalizados es de 82, 64 en el caso de Sevilla.

La Consejería, a través de la Dirección General de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica, decretó el pasado 15 de agosto una alerta sanitaria sobre el producto de carne mechada con el nombre comercial “La Mechá”, fabricado por la firma Magrudis, tras comprobar que este producto era el agente causante de los brotes de listeriosis registrados en Sevilla en las últimas semanas.

Desde la citada fecha, Salud y Familias instaron a los ciudadanos a dejar de consumir el producto, a través de comunicaciones en prensa y redes sociales. La alerta sanitaria, activada tras el desarrollo de los protocolos y de las inspecciones oportunas, significó la retirada del producto de la venta y consumo y el aviso de la misma a la ciudadanía.