Razones para repetir el juicio de Gabriel Cruz

Los padres afirman que la magistrada “dio opinión” al jurado

12 nov 2019 / 08:28 H.

La acusación particular ejercida por Patricia Ramírez y Ángel Cruz cree que “sobran razones” para repetir el juicio por el asesinato de su hijo de ocho años Gabriel Cruz, ya que la magistrada-presidenta, Alejandra Dodero, “entró a dar opinión” cuando instruyó al jurado popular sobre la agravante de ensañamiento, y la prueba pericial que avalaba su existencia. Apuntó, asimismo, que, como consecuencia de esto, los nueve integrantes del jurado popular “no motivaron suficientemente su veredicto” al descartar que Ana Julia Quezada se ensañase a la hora de dar muerte al menor.

Así se recoge en el recurso supeditado de apelación presentado por el letrado Francisco Torres, quien explicó que el análisis del recurso de la defensa de Ana Julia Quezada revela que “varios de los motivos” que se alegan “abocarían a la celebración de un nuevo juicio”. Indicó que por esta razón decidieron recurrir la sentencia si bien optaron “en un primer momento y muy a nuestro pesar” por no hacerlo aunque “estábamos convencidos de que contiene un clamoroso error al negar los informes médicos” que ellos aportaron para acreditar un supuesto ensañamiento.

“Esto ha hecho que estemos en esta tesitura de recurrir supeditadamente la sentencia”, afirmó Torres, quien añade que lo habían descartado inicialmente en una decisión “comprensible” ya que “todos los pedimentos de esta acusación, incluyendo los dos delitos contra la integridad moral, fueron confirmados por unanimidad por el jurado, salvo el ensañamiento” y no se quería dar “posibilidad alguna a aumentar el dolor de los padres”.

Pese a la apelación, la acusación particular impugna el recurso de la defensa de Quezada y pide a la sala que no atienda el pedimiento de repetir el juicio “no solo por razón de imagen de la justicia sino también por el respeto debido a la institución del jurado”. Solicita, de este modo, que confirme en todos sus extremos la sentencia que la condenó a prisión permanente revisable como autora de un delito de asesinato con alevosía y a penas de ocho años y tres meses de cárcel como autora de dos infracciones de lesiones psíquicas y otros dos contra la integridad moral de los padres del pequeño Gabriel.

El recurso solicitó la anulación del juicio y lo hace, en primer lugar, por el hecho de que el jurado negase la existencia de ensañamiento. Argumentó la acusación particular que la pericial de parte que presentaron, que apuntaba a que las lesiones que presentaba el niño se produjeron antes de la asfixia, “tenía bastante más sentido común” que la pericial médico forense y critica “la falta de respeto” a los profesionales médicos por parte de la fiscal, cuya actuación con respecto a ellos tilda de “desaforada”, añadió el letrado Francisco Torres en el escrito.