Chaves, Griñán y Viera se limitan a ratificar su versión ante el TS
El letrado de Griñán critica que el Gobierno “presionó” para que hicieran “el paseíllo”
Los expresidentes de la Junta Manuel Chaves y José Antonio Griñán y el exconsejero de Empleo José Antonio Viera comparecieron ante el juez del caso de los expedientes de regulación de empleo (ERE) irregulares y se limitaron a ratificar las declaraciones que ya hicieron por esta misma causa ante el Tribunal Supremo en el mes de abril del pasado año. El juez Álvaro Martín, en el marco de la pieza del procedimiento específico por el que se concedieron las ayudas investigadas, los citó a declarar a petición de la Fiscalía Anticorrupción y a fin de “garantizar” tanto su derecho de defensa como el principio de igualdad de las partes ante el proceso.
El primero en llegar a los juzgados del Prado de San Sebastián de la capital hispalense, a las 9:45 horas, fue Manuel Chaves, quien llegó hasta la puerta de los juzgados en coche y custodiado por un férreo control policial. En las puertas de los juzgados le esperaban decenas de medios de comunicación y ciudadanos, entre ellos miembros de la plataforma de afectados por la hipoteca, quienes, al igual que ocurrió posteriormente con Griñán y Viera, le increparon con gritos de “chorizo”, “no hay pan para tanto chorizo”, “PSOE-PP, la misma mierda es”, o “manos arriba, esto es un atraco”.
Posteriormente, Chaves no se acogió formalmente a su derecho constitucional a no declarar, puesto que, tras la primera pregunta formulada por el magistrado, se ratificó “íntegramente” en la declaración del 14 de abril de 2015 en el Tribunal Supremo. No obstante, el juez permitió que los fiscales Anticorrupción, Juan Enrique Egocheaga y Manuel Fernández Guerra, hicieran constar en acta entre 15 y 20 preguntas relacionadas con las ayudas concretas a empresas como Primayor o Bilore o la concentración de ayudas en la Sierra Norte de Sevilla.
En un comunicado difundido a la prensa una vez concluida su comparecencia, Chaves señaló que se ratificó en su declaración en el Supremo, en la que prestó declaración “durante varias horas”, destacó que allí contestó “a todas y cada una de las preguntas” del magistrado instructor y el Ministerio Fiscal, tal y como “consta en la transcripción de la misma, de 49 páginas, que está incorporada a la causa”. Griñán también emitió otro en el que explica que, en esta declaración del Supremo, “que se extendió por un tiempo superior a las cuatro horas y cuya transcripción ocupa 63 folios, intervinieron, además del juez instructor, dos fiscales de la Sala Segunda del Tribunal Supremo”, a los que contestó, “con claridad y minuciosamente, a 119 preguntas”. Al finalizar la comparecencia, el abogado de Griñán, José María Mohedano, criticó que el Gobierno del PP “ha presionado” para que tanto Griñán como Manuel Chaves prestaran declaración como investigados ante el juez del caso ERE e “hicieran el paseíllo” a fin de “compensar los casos de corrupción nuevos que hay”.
El último en comparecer fue el exconsejero José Antonio Viera, quien también se ratificó. En su caso, el PP hizo constar por escrito una pregunta relativa a si el convenio-marco de 2001 se firmó “para conceder ayudas aleatoriamente a empresas y personas afines al PSOE”.