Épico Manuel Carrasco: el público en el bolsillo con una bulería dedicada a Linares

El artista onubense rescata una letra que ya interpretó en la Feria de San Agustín de 2016
Manuel Carrasco en el concierto de Linares. / Ana Belén Portellano.
Fran Miranda

La gira “Corazón y flecha”, del cantante isleño Manuel Carrasco, recaló en la Ciudad de las Minas en el marco de la programación de la Real Feria de San Agustín de Linares este viernes, un concierto celebrado en el antiguo recinto ferial de la Estación de Madrid en el que los seguidores del artista onubense se contaban por miles. Este nuevo álbum lo ha trabajado durante años y donde cada detalle es pensado y analizado, está lleno de contrastes y de estilos musicales, dónde lleva como bandera la verdad y la música. “Corazón y Flecha” corona con de broche oro una trilogía que empezó con “Bailar Al Viento” y propagó con “La Cruz Del Mapa”, que ha llevado a Manuel Carrasco a lo más alto de la música en español alcanzando récords e hitos inigualables. Además de sus últimos éxitos y sus temas más reconocibles por el gran público, Manuel Carrasco rescató la letra de una breve bulería dedicada a Linares y sus costumbres, que interpretó por primera vez en la feria de 2016, cuando también formó parte del cartel de artistas.

Linares...

Monumento natural, en El Piélago romano,

La historia se reflejaba,

el agua de su cascada,

el Puente de Vadollano.

La mina de San Miguel,

con el plomo en sus entrañas,

el Pozo de San Vicente,

trabajadores valientes,

el dolor de tu taranta.

Paseo de Linarejos,

las palmeras que nos guían,

tus bancos cuentan tu historia,

del maestro Andrés Segovia,

hasta llegar a tu ermita.

Feria de San Agustín,

con tu ajedrez y tu torneo,

donde tú serás mi reina

y yo el peón que te defienda,

el dueño de tu tablero.

Y para salir a flote,

después de una noche de Feria,

churrería La Palotes.

Y con tus campos de olivos,

de Cástulo sus ruinas,

por la Estación de Madrid fui a Santa Margarita.

Paseando por la calle del ilustre Raphael,

llegué hasta el Parque Colón

donde te entregué mi amor,

cuando más te deseé.

La Virgen de Linarejos,

la que cuida de sus hijos,

una tapita de morro

en la Taberna Lagartijo.