Un silencioso flautista de Hamelín se lleva a miles de niños de Jaén

La capital y su provincia pierden 42.935 pequeños en los últimos 20 años

22 feb 2018 / 09:11 H.

Jaén tiene 42.935 niños menos que hace 20 años, lo que quiere decir que cada 12 meses hay 2.147 pequeños —de 0 a 15 años— menos en esta tierra. Cuando se habla de demografía, esta provincia figura entre los territorios que pierden población. Entonces, muchos interpretan que se debe a que hay personas que se marchan de aquí a otros lugares en busca de oportunidades. Es verdad que ocurre, pero el verdadero problema está en un silencio flautista de Hamelín que se está llevando a los niños de Jaén. Narra el cuento de los Hermanos Grimm —publicado en 1842— que la ciudad de Hamelín contrató a un cazador de ratas para luchar contra una auténtica plaga de estos roedores. Este hizo sonar la flauta y las ratas lo salieron de sus escondites al son de la música. Lo siguieron y perecieron ahogadas en el río. Cuando volvió a por la recompensa, los aldeanos se negaron a pagarle, por lo que el flautista de Hamelín, como venganza, hizo sonar la flauta. Entonces, los niños lo seguían al son de la música y se los llevó del pueblo. Pues, esta fábula bien se podría aplicar a Jaén. Solo hay que mirar el número de pequeños en muchos centros educativos, las fusiones y el cierre en otros y la pugna de algunos colegios —generalmente, concertados— por captar alumnos cuando llega el periodo de matriculación. Jaén tiene un flautista de Hamelín, que se lleva a los niños. Si en 1998 había 140.635 niños —de 0 a 15 años—, ahora hay 97.700, según el Instituto Nacional de Estadística.

Pero, ¿quién es el flautista que se lleva a los pequeños? Inés Casado es la secretaria de Mujer de la Unión General de Trabajadores: “Las bajas rentas que cobran los trabajadores, la falta de empleo de los jóvenes y la precariedad de los contratos hacen que no se puedan tener niños. Somos una provincia muy agrícola y la gente se piensa mucho en ampliar la familia. Además, los jiennenses se incorporan muy tarde al mercado laboral, por lo que las posibilidades de tener hijos se reducen. Por otro lado, también hay que tener presente las dificultades que tiene la mujer para conseguir un trabajo y para promocionar. Muchas consideran que, si tienen hijos, perderán su vida profesional o la limitarán considerablemente”.

Jaén está entre las provincias con mayor tasa de paro de España, es la que mayor contratación temporal hace y encabeza la clasificación de los salarios bajos del país. Sin duda, influye. No obstante, otros insisten en que la falta de conciliación laboral y familiar se erige como otro de los grandes problemas. María del Mar Torres Pulido es la secretaria de Mujer de CC OO: “Las mujeres tienen peores empleos y, además, les perjudica ser madre. El 25% de las ocupadas con hijos ha reducido su jornada laboral para cuidar a los pequeños frente al 3,44% de los varones, una decisión que está supeditada al sueldo”. Asimismo, añade: “Solo el 55% de las mujeres jiennenses vuelve a su puesto de trabajo después de ser madre, mientras que los hombres que experimentan la paternidad siempre regresan a su empleo”.

Más niños que niñas. Pese a que Jaén es una tierra en la que viven más mujeres que hombres, en la población de menos de 15 años existen más varones. Existen 50.138 varones —había 71.750 hace 20 años— frente a 47.562 féminas —68.885 en 1998—, según publica el Instituto Nacional de Estadística. El cuadro de mando del segundo Plan Estratégico de la Provincia de Jaén indica que se producen 8 nacimientos por cada 1.000 habitantes, lo que denota una tasa de natalidad que va en constante descenso.

De ahí que el análisis de la demografía jiennense invita a mirar, sobre todo, a los pequeños. Es cierto que se va más gente de la que viene y que la población es más mayor, aunque la diferencia no es muy amplia respecto a lo que ocurre al resto de España. En cambio, con los niños sí que hay un problema. El flautista de Hamelín se los lleva sigilosamente. Solo hay que mirar a las calles. Cada vez hay menos.

La esperanza de vida de la mujer es 6 años mayor que la del hombre

La esperanza de vida de la mujer es 6 años superior a la de los hombres. Las féminas jiennenses mueren —como media— con 85 años, mientras que los varones llegan a los 79, según indica el cuadro de mando integral del segundo Plan de Estratégico de la Provincia de Jaén.

Existen 643.084 habitantes, aunque la tendencia es a la baja. El crecimiento vegetativo es de 1.139 personas menos, mientras que solo el 4,12% de los municipios (serían 5 de los 97) incrementan su población. El resto pierde vecinos. El saldo migratorio también es negativo, es decir, se van 16.323 personas todos los años mientras que llegan 12.907, por lo que se pierden 3.416 jiennenses al año. Por otro lado, la población extranjera conlleva el 2,53% de las personas que viven en la capital o en su provincia.

La tasa de dependencia —personas menores de 16 años o mayores de 64 que dependen de las que están en la edad de trabajar— es del 52,23%. Se trata de un parámetro bastante alto, lo que da una idea de hacia dónde camina la provincia. No obstante, las personas dependientes crecen a partir de los 64 años y disminuyen de 0 a 16 años.

Pese a que nacen más hombres que mujeres, Jaén es una provincia con más féminas. Existen 324.873 frente a los 318.211 varones. Esto se explica con facilidad con dos indicadores. Asimismo, la esperanza de vida es 6 años mayor para las mujeres, es decir, los hombres mueren antes que las féminas. Por otro lado, hay que mirar al saldo migratorio. Si se analizan los jiennenses que se van a otras provincias y la gente que llega, se pierden más varones que féminas. De hecho, Jaén se queda sin 1.774 hombres todos los años frente a las 1.642 mujeres.

Parece evidente que la economía y las oportunidades que existen para la población resulta determinante en la evolución de la demografía que resulta claro que necesita medidas para motivar un cambio de tendencia.