Un linarense pierde la vida en el accidente de Montoro
A. M. M. y otro chófer fallecen al colisionar su vehículo con un tráiler parado en la autovía A-4

Una tragedia que pudo tener un coste en vidas humanas mucho más alto. Un linarense de 51 años, identificado como A. M. M., es uno de los dos fallecidos en el accidente de tráfico ocurrido, ayer de madrugada, en la autovía A-4, a su paso por el término municipal de Montoro, en Córdoba. El percance consistió en la brutal colisión entre el automóvil en el que iban las víctimas y un camión averiado. El varón, natural de la ciudad minera, era un chófer de la compañía Daibús —propietaria del autocar—, que, en esos momentos, iba de acompañante del conductor, el segundo fallecido, de cincuenta y siete años. De acuerdo con las fuentes, ambos son vecinos de Madrid. La parte delantera del vehículo de transporte colectivo, la zona en la que se encontraban las víctimas, quedó literalmente destrozada por el impacto.
Por otra parte, cuarenta y nueve personas —en el habitáculo había cincuenta y cinco— sufren heridas, cuatro de ellas graves o muy graves. El autobús cubría un trayecto entre Algeciras (Cádiz) y Madrid y circulaba por la calzada correspondiente a ese sentido. Los pasajeros eran de varias nacionalidades. De acuerdo con la Junta de Andalucía había treinta y un marroquíes, dieciséis españoles, un colombiano, un ecuatoriano y un estadounidense. El choque ocurrió poco antes de las tres a la altu- ra del kilómetro 361. El conductor del tráiler contra el que se estrelló el autocar dio negativo en la prueba de alcoholemia a la que fue sometido por la Guardia Civil. Desde el centro coordinador de Urgencias se enviaron hasta el lugar del accidente un equipo de emergencias sanitarias del servicio 061, tres unidades de Cuidados Críticos de los municipios cordobeses de Montoro, El Carpio y Adamuz y dos ambulancias de la red de transporte urgente. Los equipos asistenciales desplazados al lugar asistieron a tres pacientes con traumatismos graves que fueron derivados al Hospital Universitario Reina Sofía de la Ciudad de la Mezquita. Ante la magnitud del percance, el resto de ocupantes del autobús, cuarenta y tres personas, fueron trasladas al mismo complejo sanitario cordobés para la evaluación de sus lesiones.
La Guardia Civil de Tráfico señalizó la zona, cortó la carretera en el kilómetro afectado y habilitó un desvío alternativo por la vía de servicio. En paralelo, el Instituto Armado abre una investigación para determinar las causas exactas del suceso mortal.
Los enseres de los pasajeros fueron traslados por agentes de la Benemérita hasta un centro de mantenimiento de carreteras para que los recoja la compañía propietaria del autobús. La empresa se hace cargo también de todos los desplazamientos de las personas que reciben el alta y de las ilesas. Daibús comunicó el deceso de sus dos trabajadores a las familias y desplazó hasta al Hospital Reina Sofía a una profesional para asistir a sus usuarios del vehículo.
El de Montoro no fue el único accidente de autobús ocurrido ayer en Andalucía. Cinco viajeros, en- tre ellos tres menores, resultaron heridos leves al colisionar, en un choque con turismo, en la N-432, a su paso por Íllora (Granada).
El Hospital Alto Guadalquivir de Andújar, por cuestiones de proximidad, se convirtió en un foco de referencia para la atención a los heridos en el accidente de tráfico. De las cincuenta y nueve personas con lesiones, tres fueron trasladadas hasta el centro sanitario iliturgitano. Se trataba de tres de los viajeros con daños más leves. Dos recibieron el alta a lo largo del día. Una presentaba fractura de rótula y otra un traumatismo facial. En cuanto a la tercera, permaneció en Observación con politraumatismos y un fuerte golpe en la cabeza. Las fuentes indicaron que, en principio, iba a permanecer al menos durante el día de ayer en las instalaciones.
En cuanto a los otros cuarenta y seis heridos, al cierre de esta edición dos se encontraban ingresados en estado muy grave, mientras que otros tantos presentaban un estado grave. Así lo indicaron fuentes de la Delegación de Salud de Córdoba, que detallaron a Europa Press que las dos personas con peor pronóstico eran dos varones ingresados en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Reina Sofía de Córdoba. En cuanto a los otros dos, se trataba de un hombre y una mujer, que quedaron a cargo de la unidad del Traumatología, en el mismo centro de la capital.
La Junta de Andalucía y el servicio coordinado de emergencias 112 Andalucía confirmaron que veintitrés de los afectados por el accidente ya había recibido el alta hospitalaria. Los pacientes pertenecen a diversas nacionalidades. Lo previsible es que a partir de hoy más damnificados en el percance abandonen las dependencias sanitarias en las que reciben atención.