Sánchez promete su cargo sin crucifijo ni Biblia por segunda vez

El presidente del Gobierno realiza el acto sobre la Constitución española

09 ene 2020 / 09:46 H.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, prometió su cargo ante el Rey Felipe VI y sobre un ejemplar de la Constitución española y, tal como hizo ya en junio de 2018, sin crucifijo ni Biblia. Sánchez cumplió con la fórmula de prometer por su “conciencia y honor” el compromiso de “cumplir fielmente las obligaciones del cargo de presidente del Gobierno, con lealtad al Rey y guardar y hacer guardar la Constitución como norma fundamental del Estado, así como mantener el secreto de las deliberaciones del Consejo de Ministros”.

Tras la lectura del real decreto de su nombramiento, Sánchez se acercó a la mesa donde estaba abierta la Constitución y, tras una inclinación de cabeza ante el jefe de Estado, pronunció la fórmula de promesa posando su mano derecha junto a una Carta Magna abierta por el artículo 99, el relativo al proceso de investidura tras las elecciones. En el acto participaron la ministra de Justicia en funciones, Dolores Delgado, como notaria mayor del Reino; y los representantes del Poder Legislativo y Judicial: las presidentas del Congreso y el Senado, Meritxell Batet y Pilar Llop, respectivamente; el del Consejo General del Poder Judicial, Carlos Lesmes y el del Tribunal Constitucional, Juan José González Rivas. Asimismo, estaban presentes el jefe de la Casa del Rey, Jaime Alfonsín; el secretario general, Domingo Palomo y el jefe del Cuarto Militar, Juan Ruiz Casas.

El presidente Pedro Sánchez y el Rey bromearon después de la ceremonia de promesa, con un intercambio amistoso. “Ocho meses para 10 segundos” dijo Sánchez, en alusión al largo periodo que ha estado en funciones y a la brevedad de la ceremonia de promesa. “Ha sido rápido, simple y sin dolor”, fue la respuesta del Rey y, tras una breve pausa, añadió bromeando, “el dolor vendrá después”. Sánchez también reconoció, en el mismo tono distendido, que los políticos le han dado al Rey “muchas preocupaciones”.

Es la segunda vez que Sánchez cumple con este trámite, por el que ya pasó en junio de 2018, tras la moción de censura que le llevó a la Moncloa. El líder socialista se convirtió entonces en el primer presidente del Gobierno de la democracia que prometía su cargo solo ante la Constitución, sin crucifijo ni Biblia. Con la llegada de Felipe VI a la Jefatura del Estado, la Casa Real cambió el protocolo y permitió que los altos cargos prometiesen ante el Rey sin símbolos religiosos, conforme a la libertad religiosa recogida en la Constitución, pero Sánchez fue el primer presidente del Gobierno que prescindía de ellos.

En aquella ocasión, en la que Sánchez no había superado un proceso de investidura, prometió su cargo ante la Constitución abierta por el artículo 62, el que establece las funciones del Rey, incluida la de nombrar al presidente del Gobierno.

Una forma de prometer que no a todos los políticos gustó. Entre ellos, Javier Maroto, portavoz del PP en el Senado, que acusó al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de haber cometido la “máxima contradicción” por haber prometido ante el Rey guardar y hacer guardar la Constitución “y hacer exactamente lo contrario al salir de Zarzuela”. En declaraciones en el Senado en la constitución de la Diputación Permanente, Maroto reclamó a Sánchez que “además de decirlo, lo haga”, porque aseguró que los socios con los que pactó la investidura como jefe del Ejecutivo “ni guardan ni quieren hacer guardar la Constitución”, en alusión a Unidas Podemos y ERC. “Es la máxima contradicción del máximo representante del Gobierno: decir una cosa ante el Rey y hacer exactamente lo contrario cuando sale de Zarzuela”, añadió el senador.

Maroto dijo también que el futuro gobierno de coalición entre el PSOE y Unidas Podemos afronta “su primera minicrisis” a cuenta de los nombramientos de ministros y secretarios de Estado, porque el partido de Pablo Iglesias hace anuncios “por su cuenta” mientras Pedro Sánchez ha decidido dejar para la semana que viene la formación de su equipo.

Para el portavoz “popular”, Podemos le “quitó” al presidente la competencia de presentar a los ministros con la intención de que los nombres no puedan ser desmentidos y Sánchez, “claramente enfurecido”, ha retrasado el anuncio del gobierno. En la nueva legislatura, aseguró que el PP va a convertir en iniciativas parlamentarias sus propuestas electorales tanto en el Congreso, como en el Senado y el Parlamento Europeo, para mostrar que hay “un modelo alternativo” al del Ejecutivo de izquierdas. Pero también dejó claro que su partido va a plantear otro tipo de iniciativas que ha llamado “de contraste” en la forma de gobierno.

Los gabinetes de Sánchez y Torra están
en contacto

La consellera de Presidencia y portavoz del Govern, Meritxell Budó, explicó que los gabinetes del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el presidente de la Generalitat, Quim Torra, se pusieron en contacto para que ambos líderes puedan celebrar un encuentro “lo antes posible”. “La voluntad es que las negociaciones entre los dos gobiernos puedan comenzar tan pronto lo acuerden Torra y Sánchez en este encuentro que tienen previsto”, dijo en rueda de prensa tras el Consell Executiu, en la que al ser preguntada por si respetarán los tiempos pactados entre ERC y el PSOE —celebrar una primera reunión en los 15 días después de la investidura—, respondió que deberán decidirlo los presidentes.

Para Budó, los 15 días pactados entre republicanos y socialistas como plazo para que se celebre la primera reunión de la Mesa no son “exactos” y ha recordado que todavía no se ha constituido el Gobierno de Sánchez. “Y no solo porque no hay Gobierno. Previamente se tiene que poder celebrar este encuentro entre los dos presidentes, que es lo que se acordó de presidente a presidente.

La mesa con ERC no es
la Comisión bilateral

El Gobierno aclaró que la mesa de diálogo sobre el conflicto en Cataluña pactada con ERC no es la Comisión bilateral entre el Ejecutivo español y el Govern catalán ya existente y prevista en el Estatut. Así lo señalan fuentes gubernamentales después de que la vicepresidenta en funciones, Carmen Calvo, haya descrito la nueva mesa pactada con ERC como “una comisión bilateral que está en el Estatuto de Cataluña como está en otros estatutos de las Comunidades Autónomas de nuestro país”.

“Así que en términos exactamente igual que recogen otros estatutos nos sentaremos ambos gobiernos para hablar ¿de qué? Políticamente de una situación insostenible en Cataluña no sólo para quienes no son independentistas sino para la inmensa frustración que le provocaron los independentistas a una parte del independentismo al que le dijeron ‘esto va a llegar mañana y se puede hacer legalmente’ y no es así”, desarrolló en una entrevista.

reacción externa por la investidura

partido socialista europeo

El Partido Socialista Europeo (PES, por sus siglas inglés) celebró la investidura de Pedro Sánchez y subrayó que es una “gran oportunidad” para que el PSOE y el nuevo presidente del Gobierno español continúen “en su senda europea” y con una “agenda progresista” en beneficio de la sociedad española.