Reparto “desleal” de la PAC

La presidenta de la Junta de Andalucía, la “dama de hierro” del PSOE, Susana Díaz, fue a La Loma, la principal zona productora oleícola del mundo, para lanzar un recado al Gobierno en funciones del popular Mariano Rajoy. Fue a cuenta del reparto de los fondos de la Política Agraria Común (PAC) que otorga Bruselas a España para que el Ejecutivo central acuerde su distribución. Acusó a La Moncloa de haber empleado “con demasiada habilidad” la aritmética para perjudicar a Andalucía con estas ayudas. En la cooperativa “El Alcázar”, la más grande de Baeza, con 1.200 socios, desveló algunos datos que no son tranquilizadores para el sector, consecuencia, según ella, de la “deslealtad” hacia la comunidad que, como opinó, sí “arrimó el hombro” para que el Estado no perdiera ni un céntimo de fondos europeos. Una carga de profundidad en las conciencias de los olivareros en plena precampaña del 26-J, si se le da una lectura política.

Díaz, que no desveló a su equipo hasta el último momento si haría declaraciones a la decena de periodistas que cubrían su visita a la ciudad Patrimonio de la Humanidad, finalmente sí anticipó a los medios los números que luego desgranó en el salón de actos de la almazara. De esta forma, buscó multiplicar su repercusión. De las ocho provincias andaluzas y las 50 españolas, aclaró, con la decisión del Gabinete de Rajoy sobre la PAC, la que, en sus palabras, “más va a perder” es Jaén. Una afirmación que respaldó con números contundentes, como son 272 millones de euros menos para el olivar. De este cultivo dependen unas trescientas mil familias andaluzas, sobre todo, aquellas con rentas inferiores a 5.000 euros al año. Díaz se acordó de ellas porque, como afirmó, los fondos que reciben sufren un “recorte” del 16% aproximadamente. Son, según dijo, más de 200.000 pequeños productores en la comunidad y 85.000 repartidos en los 97 municipios jiennenses. A ellos se refirió como “el eslabón más débil”, por los que se sintió especialmente preocupada.

Susana Díaz, que no dio puntada sin hilo en su recorrido por la enorme aceitera baezana, aprovechó también para contraponer la actitud de los gobernantes italianos, la segunda potencia aceitera del mundo, frente a los que dirigen la nación desde Madrid. Para ello comparó la postura de los primeros con el olivar en pendiente transalpino, que sí disfrutará de las ayudas acopladas de la UE, frente a estas explotaciones andaluzas, de las que la mayoría están en las sierras jiennenses, que, según ella, estarán en desventaja en un mercado global.

Ante este panorama, Díaz prometió que su Gobierno pondrá todos los medios a su alcance para aliviar esta situación, una promesa que no tiene valor para el PP, ya que su presidente provincial, José Enrique Fernández de Moya, juzgó que Díaz viajo a Jaén para “hacerse la foto” simplemente. La presidenta andaluza no eligió el escenario de sus acusaciones al albur. “El Alcázar” de Baeza está abierta a las visitas turísticas y, en esta campaña, decidió comercializar su aceite de cosecha temprana, que lucirá el distintivo “Jaén Selección” y le reporta un aumento de las ventas del 14%, como explicó su presidente, Manuel Reyes Fernández. Una clara apuesta por las líneas de trabajo para revitalizar el principal sector de la economía jiennense y baezana que está en consonancia con las premisas que se marcan desde las instituciones públicas de la provincia jiennense.