“Para acabar ahora con el virus son necesarias la mascarilla y la PCR”

José Miguel Cisneros, director de la unidad de gestión clínica de enfermedades infecciosas, microbiología y medicina preventiva del Virgen del Rocío

09 may 2020 / 10:14 H.

Este reputado especialista en enfermedades infecciosas y microbiología clínica es de Chilluévar y señala durante toda la entrevista dos herramientas imprescindibles para acabar ahora con el coronavirus, las mascarilla obligatoria y el diagnóstico precoz con la prueba PCR. Fue el doctor que curó al primer paciente con covid-19 en Andalucía.

—¿Cómo vive la pandemia un experto como usted?

—Con la dificultad y preocupación que tienen los españoles de estar viviendo una crisis sanitaria sin precedentes, al menos en esta generación. Como es natural, con todos los sentimientos y circunstancias a estar viviendo una epidemia de esta magnitud en la que hay cientos de miles de personas que han tenido la infección y, desgraciadamente, más de 20.000 fallecidos. Se vive con preocupación por todo este sufrimiento.

—No se vio venir que este virus sería tan letal...

—Efectivamente. Es un nuevo coronavirus, es diferente y, por lo tanto, desconocido hasta que fue descrito en China hace tres o cuatro meses. Realmente no fue previsto a nivel mundial; no hubo previsión de que esto iba a suceder, Cuando sucedió en China la mayoría de los países no se prepararon para afrontarlo porque pensaron que no llegaría desde tan lejos, aunque algunos de su entorno cercano sí lo hicieron y se preparó. El mundo no estaba preparado para esta pandemia.

—En Andalucía vamos a entrar en la primera fase de desescalada. ¿La situación actual va acorde con ello?

—Creo que sí, que es necesario hacerlo, poner en marcha la región en este caso, los hospitales, las empresas, el funcionamiento normal. No debemos olvidar que tanto la pobreza como la parálisis del sistema sanitario también impactan en salud; un impacto que aún no hemos analizado. Deberíamos estar preparados. Ahora mismo la transmisión del virus basa en los casos diarios de infección, que se han reducido de manera extraordinaria desde las cifras de finales de marzo. Esto permite tomar estas decisiones. Estamos preparados para hacerla. Va a depender de que hayamos aprendido las lecciones que nos ha dado la primera ola de la pandemia. Si lo hacemos bien, y cumplimos que estas lecciones, confío en que no habrá una segunda ola, al menos como la primera. Es posible que haya más casos, porque con el desconfinamiento aumentan los contactos, pero si lo hacemos bien serán casos controlados, no desbordarán el sistema sanitario y podrán ser bien atendidos. No necesitaremos volver a paralizar el país con un confinamiento. La primera lección que hemos aprendido para que no se repita es que lo que verdaderamente nos protege frente al coronavirus es la mascarilla. Es una herramienta clave que no debemos olvidar mientras haya coronavirus en esta tierra. El mecanismo de transmisión de este virus lo conocemos muy bien, y es a través de las secreciones respiratorias. Por lo tanto, la mascarilla protege cuando la distancia de seguridad haya que romperla por la actividad que se realiza. Mascarilla obligatoria siempre...

—¿Era entonces una veleidad cuando se decía que no era imprescindible llevarla?

—Como en todo, en esto también estamos aprendiendo, por eso le digo que la lección que no podemos olvidar si queremos que no se repita es ponernos la mascarilla para protegernos. Es ahora la herramienta más poderosa para acabar el virus, porque si evitamos transmitir un caso estamos consiguiendo que el virus deje de transmitirse y así lo controlamos y desaparece.

—¿La segunda lección?

—Es del ámbito profesional. Tenemos que diagnosticar a los pacientes inmediatamente, también analizar su entorno y sus contactos para detectar casos secundarios. Si hacemos esto apagaremos un microbrote y no generar un brote como pasó en febrero porque no diagnosticamos a los pacientes rápidamente. Eso lo hacemos con PCR, con ese bastoncillo que toma muestra de secreciones respiratorias a través de la nariz. Eso determina la existencia del virus en la persona. Esa es la otra gran lección, el diagnóstico inmediato haciendo la prueba PCR. Cuando el director general de la OMS dice test, test y test, se refiere a esto.

—¿Y los test rápidos?

—Son de calidad deficiente todavía si lo comparamos con el nivel de sensibilidad de la prueba serológica (PCR). Es útil para hacer la encuesta de seroprevalencia que hace el Gobierno en toda España y en Andalucía. Sirve para calcular de manera aproximada, con intervalo de confianza y extrapolación de la muestra, qué número de españoles ha podido infectarse además de los ya diagnosticados. Se busca con ello más información.

—Insiste en la prueba PCR...

—Sí, la persona con síntomas debe consultar para que los médicos de primaria y hospital indiquen la prueba rápidamente. Los epidemiólogos harían el rastreo de contactos de esta persona en primaria y los preventivistas en el hospital, mientras los equipos de microbiología procesan las muestra de forma rápida. Este es el tipo de prueba y el proceso imprescindible.