Los casos de maltrato animal en el mar de olivos son “excesivos”

Jaén es una de las provincias andaluzas en las que hay más maltrato animal”. Así lo piensa Manuel Serrano, excoordinador de Pacma y persona sensibilizada con la causa. En esta línea, enumera algunas de las situaciones que, a lo largo de su carrera política y fuera de ella, ha vivido. “He visto perros famélicos abandonados por sus propietarios”, lamenta sobre una situación que, según cuenta, se “agudizará” con el fin de temporada de la caza. De este modo, los canes terminan, o bien “lanzados al fondo de un pozo, donde se ahogan, o ahorcados en las inmediaciones de un olivar”. Algo que, para Serrano, no cabe en la cabeza de “cualquier persona que tenga un mínimo de empatía por los seres vivos en general”.

A este respecto, el problema de que ocurra esto no es otro que los propietarios de animales, perros en este caso, los “utilizan en su beneficio propio”. Uno de los ejemplos que expone claramente el exresponsable de Pacma en Jaén es el de las carreras de galgos, “muy extendidas en la provincia”. “Cuando esta raza de perro ya no sirve para correr, todos sabemos cuál es su triste final”, subraya.

Manuel Serrano considera más que necesaria una fuerza política en España que aglutine todo el movimiento animalista. Así, y no de otra manera, “se conseguirá acabar con el maltrato animal”. “No tenemos representación en Jaén, aunque se han conseguido varias mejoras en la provincia”, dice el excoordinador, al mismo tiempo que detalla: “Acabamos con la tradición del lanzamiento de la pava en Cazalilla, que no se hace desde 2016”. No obstante, en la celebración de este año, alguien lanzó una pava viva desde una casa particular, cercana a la plaza de la iglesia. En su momento el alcalde de Cazalilla se desmarcó del hecho y apuntó como autores a los partidarios de esta tradición.

El excoordinador de Pacma también señaló directamente a las fiestas de Marmolejo y su tradición de “Atrápalo como puedas”, que consiste en “embadurnar varios cochinillos de grasa” y soltarlos para que los asistentes los cojan. De hecho, el “festejo” se canceló unas horas antes gracias a la labor de Pacma. En esta línea, Serrano destaca que algunos de los cerdos “mueren por el peso de la gente que se les echan encima con el fin de atraparlos”. Así, se congratula de que algunas de las fiestas de Jaén “no maltraten animales”. A pesar de todo, considera que hay “mucho por hacer para acabar con esta lacra social, tanto a nivel de la provincia como en toda España”.

En este sentido, los animales “no son un regalo”. Como medida paliativa, Manuel Serrano cree que “educar y concienciar a las nuevas generaciones en la importancia de la vida de los animales” es parte de la solución a esta problemática. “Aún son miles de casos los que hay en Jaén”, lamenta acerca de una grave tesitura que tiene solución.

“En la provincia lo tenemos muy complicado, aunque hay muchas más posibilidades para acabar con el maltrato animal”, dice. Si bien es cierto, asegura: “Están surgiendo partidos que, desde la política, tienen intención animalista”, señala Serrano, sobre una “lacra social” contra la que se dan pasos en la capital. “En Jaén se consiguieron algunas mejoras gracias a mí, como responsable del partido, y al Ayuntamiento”, dice el excoordinador de Pacma, a la vez que espera con ganas que la situación para los animales sea mejor tanto en la provincia, como en la capital. “Aún queda mucho por hacer”, hace hincapié Serrano.