La “sencilla” cesión del terreno del APA III roza el bloqueo
La Junta, insatisfecha con las cargas y la calificación del solar municipal
Toda la documentación requerida por la Junta está en manos de la Administración regional, como confirmó ayer el alcalde, Javier Márquez, al ser preguntado sobre los trámites para la permuta de terrenos que desbloquearán la construcción de un instituto en el casco antiguo, una viejísima demanda de los vecinos de esta parte de la ciudad. En principio, al menos en opinión del regidor, esto ya es suficiente para que se ponga en marcha el proyecto, toda vez que, conforme al pacto alcanzando ya en 2003, hay vía libre para que Sevilla reciba los terrenos del antiguo colegio Santa Teresa, en El Valle, a cambio de construir el centro de Secundaria en el famoso solar del APA III. Pero no es tan sencillo, el Gobierno andaluz le pone reparos al suelo, así lo confirmaron fuentes de la Junta.
Como se explicó a este periódico, en el certificado remitido por la Alcaldía sobre la parcela de El Valle, los 2.110 metros del Santa Teresa, está calificados de uso dotacional, cuando la Junta requiere que su calificación sea patrimonial para su aprovechamiento. Además, sobre este espacio pesan demasiadas cargas, que el Ejecutivo regional no está dispuesto a asumir. De ahí que, una vez que ya tiene todos los papeles solicitados en su mano, el proceso establecido, fruto de un dilatado y, a la vista de los hechos, poco provechoso diálogo entre las administraciones local y autonómica, vuelva al punto de partida. Las certificaciones regresarán a la Plaza de Santa María después de haber sido estudiadas por los servicios técnicos de la Junta en Jaén.
La partida de los presupuestos autonómicos consignada, y no ejecutada, para el nuevo instituto del casco antiguo, está entre los 3,7 y 4,5 millones de euros.
La entrada en vigor del nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) en marzo del pasado año y el beneplácito del pleno de la Corporación, hicieron posible que el Ayuntamiento remitiera a la Junta de Andalucía la propuesta para permutar el solar de San Andrés, conocido como APA III y propiedad de la Agencia de Vivienda y Rehabilitación de Andalucía, AVRA, por el terreno que ocupó el colegio Santa Teresa. El documento contiene información sobre la clasificación urbanística de los solares que serán objeto de la permuta, así como su valoración económica. De acuerdo con las exigencias de AVRA, la estipulación tercera del convenio aclara que la puesta a disposición de los terrenos “se realiza una vez que se ha procedido a la depuración física y jurídica” del solar del colegio Santa Teresa. “A tal fin, y con la colaboración de ambas administraciones, se ha procedido ya a la resolución de la doble matriculación existente y, en consecuencia, se ha rectificado la inscripción de la titularidad municipal”. El proceso de intercambio de documentación continúo y, últimamente, según las informaciones transmitidas, solo había que salvar aspectos de poco calado. Sin embargo, parece que estos flecos se complican y, de nuevo, lastran una intervención que los vecinos del casco urbano de la ciudad reclaman desde hace ya tres décadas. Colectivos ciudadanos insisten, una y otra vez, que la ejecución de este centro educativo es crucial para la transformación de esta parte de la ciudad.