La modelo británica Stina Sander, como ejemplo en la Red de mujer real
La belleza “auténtica” coge peso con el “hastag #ImNoAngel”
Parece que “poco a poco” y gracias a la visibilidad de algunas mujeres famosas –cantantes, actrices y modelos– el canon de belleza femenino está en cambio desde “línea delgada” hacia la “#Curvy”, aunque la plataforma Twitter se empeña en ocultarla. Las redes sociales, que se han convertido en altavoz, en tiempo real, de los problemas y acontecimientos de la sociedad, reclaman, desde hace tiempo, la belleza “de la curva”, la hermosura de la mujer real y de las tallas grandes. El “hastag #ImNoAngel” es el último emblema de este movimiento.
Aunque todavía existen páginas web que fomentan la anorexia con carreras de pérdida de kilos, consejos prácticos para adelgazar mejor, cómo vomitar sin que se den cuenta los padres e, incluso, “oraciones a Ana”, que es como denominan la anorexia, muchas mujeres reales utilizan en positivo las posibilidades que ofrece el “universo 2.0” en favor de la salud y de la belleza real.
Es el caso de la modelo Stina Sander, que pese a haber perdido seguidores en la red Instagram decició poner imágenes de su vida poco “glamurosas” (como la de su rostro con crema de depilar en el labio superior u otra, tras salir de una sesión médica después de realizarle una limpieza de colon). “No te sientas acomplejada por algunos de tus defectos, pues nadie es perfecto: ni siquiera las modelos”, escribió la británica en la Red sin filtros y ni etiquetas, como debe ser una mujer real.