La Misa Crismal reúne a los sacerdotes de la Diócesis
La bendición de los santos óleos se realiza en esta ceremonia
La Catedral de Jaén acogió la Misa Crismal, presidida por el obispo emérito, Ramón del Hoyo, y concelebrada por Antonio Ceballos, obispo de Cádiz y Ceuta. Asistieron más de un centenar de sacerdotes llegados desde todos los puntos de la Diócesis, además de numerosos feligreses y religiosas. En esta eucaristía, se realiza el rito de la bendición de los santos óleos, que servirán a lo largo de todo el año para ungir a los enfermos, a las personas que se confirman, así como a los que reciben los sacramentos del bautizo y de la orden sacerdotal. También durante la celebración de esta misa, los presbíteros presentes renuevan sus promesas sacerdotales.
En su homilía, Ramón del Hoyo hizo referencia a la etimología de las palabras “elaion” (aceite) y “éleos” (misericordia). Recordando las palabras de Benedicto XVI, el obispo de Jaén explicó: “La unción para el sacerdote significa también el encargo de llevar la misericordia de Dios al hombre”. Los santos óleos serán repartidos por todas las parroquias.