La Cámara demanda ayuda para sobrevivir

José Luis Bonet se reúne con el pleno empresarial y saluda a los empleados que todavía siguen en la institución cameral

23 jun 2016 / 10:00 H.

El presidente de la Cámara de Comercio, Industria y Navegación de España ya sabía que la de Jaén está “en el alambre”. Su presidente, Manuel Barrionuevo, y algunos miembros del pleno han mantenido diversas reuniones en Madrid para narrarle los problemas que sufre. Pero, sin duda, no es lo mismo oírlos que verlos y sentirlos en primera persona. Por eso, José Luis Bonet acudió, antes del desayuno coloquio “Diálogos: JAÉN, Nuevo Milenio” a la sede cameral de la Carretera de Madrid —antiguo Vivero de Empresas— para conocer la situación que atraviesa esta institución.

“Ha sido una reunión muy productiva. Tengo que decir que me siento respaldado”, decía el presidente jiennense, Manuel Barrionuevo, después del encuentro con el máximo dirigente de la red española de Cámaras de Comercio e Industria. “Hemos reunido el pleno para contarle, una vez más, la situación que atravesamos. Ya la conocía, pero la ha podido ver. También ha saludado a los trabajadores —que llevan meses sin cobrar—, a los que ha dado apoyo y muchos ánimos”, narra el presidente jiennense después de la visita.

El pleno de la Cámara de Comercio e Industria de Jaén le explicó que ya cuenta con un presupuesto para el año que viene, que se ha elaborado ligado a un plan de viabilidad —se prevé aprobar el próximo martes—. Asimismo, le enumeró las propuestas que existen para desbloquear la situación y conseguir que vuelvan los ingresos a la institución. José Luis Bonet insistió en que la crisis no ha sido ajena tampoco para esta red de apoyo a los empresarios y enumeró algunos proyectos, que están dotados con fondos europeos y que vienen ligados a la innovación, que se desarrollarán durante los próximos meses y que la Cámara de Comercio de Jaén podría conseguir. No obstante, el principal problema es el embargo de las cuentas, que bloquea cualquier ingreso. Sin embargo, la visita de José Luis Bonet sirvió para animar a un grupo empresarial que dejó bien claro que no se rinde.