Hosteleros, “a tope” durante los días de feria, con o sin terraza

Asostel afirma que está todo reservado y esperan una gran afluencia

12 oct 2019 / 11:03 H.

La ampliación de terrazas en el barrio de San Ildefonso tiene ya sus años de tradición. Empezó cuando los jiennenses, camino de la Feria de San Lucas en Felipe Arche, paraban a medio camino para comer y “coger fuerzas” antes de bajar a las casetas. Así, los bares de la zona comenzaron a sacar las terrazas, el tráfico rodado fue reduciéndose, hasta que se convirtió en parte de la decoración ferial, con los farolillos y las guirnaldas de pared a pared en las históricas calles de la capital jiennense. De esta forma, el siguiente paso fue cerrar al tráfico al mediodía para favorecer el espacio a los viandantes.

“La gente viene, se toma algo, come tranquilamente —sobre todo familias con niños pequeños o personas mayores, que necesitan un lugar más cómodo— y, después, bajan a la feria, es lo normal”, explica Antonio Lechuga, presidente del colectivo de hosteleros de Jaén, Asostel. Sin embargo, este año no se cerrará la calle, el tráfico continuará discurriendo por San Ildefonso con normalidad. ¿Afecta, realmente, a la conocida como feria de día? “Poco”, dice con claridad Lechuga. Al parecer, la medida que hasta ahora permitía la colocación de terrazas “en mitad” de la calle, solo favorecía a unos cuatro o cinco locales, según explica. “La mayoría no lo notamos, es decir, el que tenga terraza venderá más, y el que no, menos”, afirma, y añade: “En todo caso, afecta al número de contrataciones, pues los que pensaban llamar a tres o cuatro personas para que se hicieran cargo de la terraza, ya no harán falta”.

De todas formas, Lechuga insiste en que si, con esta medida, se busca que la aglomeración de gente en San Ildefonso sea más fluida y que prefieran bajar al recinto ferial, “de poco servirá”. “Tienen que dejar de culpar a la feria de día de la caída en el número de personas que bajan al recinto ferial, no tiene nada que ver, porque aquí seguirán viniendo para comer”, recuerda el presidente del colectivo, y hace hincapié en que, al concluir la feria, los números hablarán. “Se va a demostrar, al terminar San Lucas, cómo no importa si se cierran calles o no, si se hacen aquí menos actividades o no, nosotros no tenemos nada que ver”. Es más, respecto a las reservas en los bares y restaurantes de la zona centro afirma que están “a tope”. “A la gente le gusta comer aquí y lo seguirá haciendo”, apunta. Hay que recordar que para el sector esta semana es de las más “fuertes” del año, con grandes beneficios económicos, comparables a los días de Semana Santa o Navidades. Por ello, tanto el barrio de San Ildefonso como los locales del centro de la capital se visten de feria y abren sus puertas, dispuestos a ofrecer la versión más suculenta de San Lucas.