El justificado arreglo de Fernando IV divide al barrio
Los trabajos avanzan a buen ritmo, en medio de críticas por la sustitución del tradicional adoquín por asfalto impreso
Qué vergüenza de lo que hacéis con el casco histórico, partida de catetos”. Escrita en tiza azul, esta pintada sobre el flamante asfalto, recién extendido en la calle Fernando IV, expresa parte del sentir de los vecinos del barrio del Pilar del Arrabalejo y alrededores que asisten a la ejecución de los trabajos de reparación, más que necesarios y reivindicados por otra parte, en esta vía. El proyecto se puso en marcha el pasado 26 de diciembre de 2017 y está previsto que esté culminado para “después de Reyes”, tal y como explicó en su momento el concejal de Mantenimiento Urbano, Juan José Jódar. Lo cierto es que el edil, cuando explicó lo que se iba a hacer en la calle, ya dejó claro que, en lugar de reponer el maltrecho adoquín por el que pisaban los viandantes y circulaban los coches, se iba a emplear betún que, eso sí, para darle al firme apariencia de viejo, se imprimiría, es decir, tras estar extendido, se raja superficialmente para que parezca que hay baldosas y no asfalto.
Pero, a tenor de la controversia generada, parece que una cosa fue pensar en lo que se iba a hacer y otra es verlo. El presidente de la asociación vecinal del popular barrio del Pilar del Arrabalejo, Juan Conde, reconoce que la parroquia está dividida y, de hecho, él mismo, opta por la prudencia antes de emitir cualquier juicio, a la espera de conocer el resultado final de las labores de reparación, que están a pleno rendimiento. “Hay gente que vive en la calle de toda la vida, harta de los tropezones con los adoquines, de las torceduras de tobillo y de los baches que había, que ven mejor que se asfalte, a otros, la verdad, es que no les gusta”, admite. Lo que sí es cierto, a su juicio, es que algo había que hacer y más pronto que tarde. Y es que recuerda que, en los seis años que lleva como representante del colectivo ciudadano, nunca ha dejado de lado la calle Fernando IV, convertida en un “calvario”.
Esta arteria, aunque no lo parezca por su trazado sinuoso y empinado, tiene un gran tráfico, recuerda, tanto de peatones como de vehículos, al conectar con los Baños Árabes, San Juan de Dios, el Teatro Infanta Leonor y enlazar hacia la Carretera de Córdoba. “Son casi doscientas personas las que tienen allí su casa y estimo que habrá una veintena de cocheras, el arreglo era más que necesario”, deja claro, satisfecho de que el Ayuntamiento haya brindado a todos los que guardan allí su coche la posibilidad de ocupar, por unos días, una plaza en los aparcamientos públicos municipales, sin coste alguna. Cuando termine la reforma, criticada, entre otros, por el secretario general del PSOE de Jaén y presidente de la Diputación, Francisco Reyes, en su cuenta de Twitter, el aspecto de Fernando IV será similar al de Almendros Aguilar y Martínez Molina. Cuando se retiró el adoquín de estas vías del centro, también hubo revuelo.