El futuro incierto del tranvía

Márquez ve “difícil” que pueda funcionar con una aportación de la Junta de solo el 40%

12 mar 2016 / 10:32 H.

Después de un atípico discurso de investidura, en el que anunció el comienzo de una nueva era política con la colaboración entre administraciones como premisa, el primer gesto con el que Javier Márquez inauguró esa nueva etapa fue la visita a los trabajos que se estaban realizando, a principios de diciembre, en las zonas verdes del trazado tranviario. Aquello valía más que todas las palabras y fue acompañado de unas declaraciones en las que el regidor se mostró confiado en la posibilidad de que el Ayuntamiento y la Junta de Andalucía alcanzaran un acuerdo sobre la puesta en marcha del tranvía que fuera “beneficioso” y “sostenible” para la ciudad.

Sin embargo, las reflexiones que el munícipe lanzó sobre el sistema tranviario en el desayuno informativo de Diario JAÉN arrojaron sombras sobre el futuro de un medio de transporte en el que se invirtieron más de 100 millones de euros del erario público andaluz. Márquez consideró que, en el desarrollo de esta polémica infraestructura, que cuenta con casi tantos defensores como detractores: “Se hizo la casa por el tejado”. “Fue una imposición que no estuvo suficientemente razonada y financieramente insostenible”, sentenció el regidor, que se hizo eco de la “sorpresa” que habría mostrado en su presencia un responsable político de la Junta de Andalucía sobre la manera en la que se quiso implantar el tranvía en Jaén, “sin estudios previos”, criticó.

“Ahora”, el objetivo “no es seguir hacia adelante en el mal sentido”, comentó Márquez, que, sin mencionarla expresamente, con esta afirmación aludía a la constitución de la comisión técnica que, desde esta semana y durante los próximos tres meses, hará un inventario de la infraestructura, inutilizada, y analizará la viabilidad de la propuesta de explotación que el consejero de Fomento y Vivienda, Felipe López, presentó, en Jaén, el 5 de noviembre. Es el momento —subrayó el regidor— de “ver qué posibilidades existen” para el sistema tranviario. Y, para ello, consideró fundamental que se realice un estudio de movilidad.

Aseguró “que no se hizo en su momento”, aunque, acto seguido, incurrió en una contradicción al abogar por actualizarlo a 2016. De hecho, sí se hizo un estudio de movilidad que compatibilizaba el tranvía con el transporte de autobuses que tiene concesionado la empresa Castillo y está incluido en el nuevo PGOU. El segundo aspecto al que apuntó Márquez fue al chequeo de la infraestructura, ya que, además del robo de material que se produjo en las cocheras de Vaciacostales, en agosto del año pasado, el equipo de Gobierno local siempre ha mantenido que nunca llegaron a subsanarse todas las deficiencias del sistema. Y, por último, aludió a las “posibilidades de concesión [administrativa], si procede o no y dependiendo de la aportación” financiera que realice la Junta de Andalucía. Atendiendo a las características de la ciudad, como centro de la actividad administrativa, sanitaria y universitaria, la propuesta de la Consejería de Fomento reconoce una cierta perspectiva metropolitana al tranvía y se muestra dispuesta a afrontar el 40% del déficit de explotación de este transporte, con un servicio reducido. Sin embargo, aun sin las conclusiones de la comisión técnica, el alcalde sugirió ayer: “Con el 40% de aportación, me parece complicado que pueda funcionar”. A pesar de todo, consideró un avance que el Ejecutivo autonómico se haya decidido colaborar con el Ayuntamiento. “Fue la que dio el problema y deberá ser parte de la solución”, remató.