De la ilusión a las pedreas y reintegros en la provincia

La suerte vuelve a ser esquiva con los jiennenses otro 6 de enero más

07 ene 2020 / 11:01 H.

Todos los que jugaban alguna participación del Sorteo Extraordinario de El Niño se encomiendan ahora a la base fundamental del bienestar, la salud. Sin ella no hay disfrute posible de la fortuna. Con ella son más llevaderas las decepciones. Ni primero ni segundo ni tercero. No hubo suerte ayer con los bombos de los que los niños de San Ildefonso, en una ceremonia más pragmática y rápida que la del 22 de diciembre, extraen las bolas con la numeración de los grandes premios de El Niño, nombre amable donde los haya para la última oportunidad con la que tentamos al azar a la búsqueda de un dinero extra, cuando no de la riqueza.

El consuelo, que no es tal, tiene apelativo de pedrea y reintegro que, salvo sorpresas de algún número comprado en otras provincias, es lo que se van a llevar al bolsillo los jiennenses con décimos o participaciones. La suerte es esquiva y hay que remontarse a enero de 2018 para recordar alguna celebración. Aquella mañana era mucho más fría que la de ayer. Nevaba en Martos. Los copos, espesos, no impidieron que Mariano Castro, dueño del estanco que lleva su nombre, saliera al portal con una empleada y su familia a celebrar el pellizco que la suerte deparó con el segundo premio. También Torredelcampo pudo celebrarlo con otra pequeña porción repartida por la Asociación Cultural Santa Catalina y por un grupo de miembros de la asociación Celedonio Cózar. En total fueron unos 110.000 euros entre los dos municipios de La Campiña olivarera.

Buscar el último primer premio que nos visitó para quedarse significa remontar hasta 1996. Fue en Úbeda, después Jaén capital por dos veces (1995 y 1982); Linares (1962); Marmolejo (1956); Baeza (1934) y la Carolina (1924), según la estadística facilitada estos días por Loterías y Apuestas del Estado.

La otra estadística oficial tiene que ver con la compra de billetes o participaciones, y con la cantidad que se gastan provincias y comunidades autónomas. Son estimaciones previas basadas en los aquilatados números que maneja el organismo nacional, concretados tras el sorteo, cuando se conoce realmente lo gastado y se puede hacer la media de hasta dónde nos rascamos el bolsillo para participar. Lo mismo se hace con el sorteo de Navidad.

Loterías consignó este año para la provincia 13.170.200 euros. Con una población de 643.484 habitantes, la consignación para cada jiennense es de 20,47 euros, la más alta de toda Andalucía. Aquí se han puesto a la venta 65.851 billetes. Habrá que esperar a los datos consolidados para ver realmente cuánto se ha ajustado con la consignación. Andalucía tenía 121.132.200 euros, con 14,46 euros por habitante y 6.5.661 billetes puestos a la venta.

De este sorteo existían referencias en 1868 y ya se le conocía por ese nombre, El Niño. Probablemente debido a la cercanía de fechas con la tradición religiosa de la Epifanía del Señor, o bien por la célebre adoración de los Reyes Magos al Niño en su portal de Belén. Seguramente, entonces también se echaría mano de la salud como sucedáneo fundamental de la suerte. Ayer no había corrillo, tertulia o reunión, además de mensajes a través de las redes sociales, que no se interesaran por la suerte de la hermano, el primo, la vecina o el amigo. ¿No te ha tocado? Pues la salud que no falte. En cualquier caso, siempre nos quedarán las rebajas. Bueno, bonito y barato.