Alicante detecta 26 nuevas fincas con Xylella fastidiosa

Los cultivos bien cuidados y trabajados resultan más resistentes a la bacteria

07 sep 2017 / 10:46 H.

La Xylella fastidiosa avanza en Alicante. Después de que esta provincia registrara el primer brote en la península —tras algunos positivos en olivos de Baleares—, el laboratorio nacional de referencia confirma nuevos positivos. Precisamente, la Generalitat de Valencia informa de que se ha detectado la presencia de la bacteria en 26 nuevas parcelas de almendros. De ellas, 23 se encuentran dentro de la zona demarcada de la Marina Baixa —allí se encontraron los dos primeros brotes—. El plan de acción contempla tratamientos insecticidas contra los posibles vectores en las parcelas infectadas y a 100 metros a la redonda. Además, luego se procederá al arranque de los árboles que se han visto afectados.

Resulta significativo que todos los casos que se han detectado en Alicante afectan a almendros. A diferencia de en Baleares —donde se halló en el olivar—, aquí solo se ha detectado en este árbol. Los dos primeros focos se encontraron el 29 de junio y sirvieron para poner en alerta al resto de provincias y de comunidades. El problema no solo está en el impacto de la Xylella, sino en las medidas que establece la Unión Europea, que contempla el arranque de todos los cultivos dentro de un amplio radio. La nueva zona demarcada en Alicante contempla las 26 parcelas infectadas, que abarcan 110.000 hectáreas agrícolas.

La Consejería de Agricultura de la Junta de Andalucía declaró a Jaén como una zona “de frontera” —al igual que Granada y Almería—, por lo que mantiene un importante dispositivo de control y de vigilancia. Afortunadamente, hasta el momento, todos los análisis que se han realizado a los cultivos han resultado negativos.

El impacto. La ingeniera agrónoma Francisca Gutiérrez indica que los casos de Xylella fastidiosa se detectan en cultivos que se encuentran en una situación cercana al abandono, es decir, fincas en los que no existe un trabajo intenso y existen déficit de nutrición en los árboles. De ahí que surge la duda —y es mejor mantenerla— de qué si el olivar jiennense, que destaca por el cuidado de las parcelas, el riego y la nutrición de los árboles, sería mucho más resistente a la Xylella fastidiosa. Por el momento, no existen caso alguno. Por otro lado, los casos que se han encontrado en la península, por ahora, se centran en el almendro.

Asimismo, los insectos son el vector que sirve para transmitir la bacteria entre los cultivos. La duda está en si disminuye el riesgo cuando caigan las temperaturas. “Creo que la incidencia será muy similar a la del verano o, incluso, más, ya que se trata de un tipo de insecto que es mucho más sensible a las altas temperaturas que a las bajas”, afirma Francisca Gutiérrez.

No obstante, la ingeniera agrónoma no se olvida del problema de la verticilosis y del hongo que lo causa. Considera que se trata del principal problema de sanidad vegetal que existe en el olivar de la provincia —la Xylella es una amenaza—, por lo que hay que prestarle una enorme atención. “No podemos olvidarnos de la verticilosis. La falta de precipitaciones en los últimos tiempos ha hecho que se palie un problema grave que afecta a nuestro campo”, manifiesta. Sin embargo, en cuanto que llueva, la situación se volverá a agravar. El protocolo contra la Xylella de la Consejería de Agricultura se mantiene activo para detectar con premura cualquier caso. Además, existen controles —en colaboración con la Guardia Civil— para controlar el material vegetal.