Adiós verano, hola desempleo

La provincia jiennense cuenta en septiembre con unos 500 parados más que en agosto

03 oct 2019 / 10:15 H.

Casi 500 jiennenses volvieron a la cola del paro en septiembre. Así queda constatado en los datos que el Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social hizo públicos a modo de balance del último mes, que marca la salida del verano y, por lo tanto, la “destrucción” de muchos empleos que, por el mismo motivo, se crearon durante la época estival. De este modo, la estacionalidad avivó la llama durante junio, julio y agosto, pero la llegada de septiembre no supuso la vuelta al trabajo a pesar de lo que suele decirse. En concreto, en la provincia se quedaron en paro 480 personas tras el verano. Eso sí, no ha sido la más castigada por el desempleo a nivel andaluz, de hecho, es la que menos. Jaén cierra la clasificación de las cinco provincias andaluzas donde aumentó el paro.

En primer lugar se encuentra Cádiz, donde se fueron a la calle 5.646 personas, lo que se traduce en una subida del 4,22%. Unos 2.200 desempleados más se contabilizaron en Málaga —un 1,63% de incremento— y 1.637 en Granada —un 2,08%—. Por su parte, Huelva, junto con la de Jaén, es la provincia que menos desempleados inscribe en las listas del paro. En concreto, fueron 685 por los 481 de la provincia jiennense. Lo que se traduce en un aumento del 1% respecto al mes anterior.

En la otra cara de la moneda, hay tres provincias en Andalucía que mejoraron el dato en comparación con agosto. Asimismo, Sevilla incorporó al mercado laboral a un total de 3.586 —bajada que, en términos porcentuales, supone 1,93 puntos—. En Almería y Córdoba también se experimentó que, con el fin del verano, no se cumplieron los pronósticos. De esta manera, en la primera, el paro disminuyó en 1.170 personas y en Córdoba hay 1.038 parados menos de los que había en agosto. Datos positivos que, excepto en la provincia almeriense, parecen seguir el mismo patrón. Dicho de otro modo, en los destinos de costa con gran afluencia —Málaga, Cádiz y Huelva— aumentó el paro, mientras que en los de interior, siguió la tendencia contraria. Eso sí, a excepción de Jaén, donde hay más parados, y la provincia almeriense, en la que se registran aún menos que en agosto.

Si se analizan las cifras desde otra óptica, y por extraer el matiz positivo, es el menor repunte del paro en España desde 2004. Es decir, que en 15 años la diferencia de número de parados entre los meses de agosto y septiembre no ha sido tan pequeña. En esta línea, el desempleo aumentó en 13.907 personas en toda España —un 0,4% más que el mes pasado—, su menor alza desde 2004, cuando aumentó en únicamente 874 personas. Tras el repunte de septiembre, el segundo consecutivo después del de agosto, el volumen total de parados se situó en 3.079.711 desempleados, su nivel más bajo en un mes de septiembre desde 2008 según los datos mensuales aportados por el Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social.

Dentro de la serie histórica de septiembre, que se inicia en 1996, el paro subió siempre en este mes salvo en los años 2005, 2006 y 2007.

El repunte de 2019, eso sí, es el menor de los últimos 15 años. De hecho, hay que remontarse hasta septiembre de 2004 para encontrar un ascenso de menor calibre —874 desempleados—. Si se tienen en cuenta las bajadas del periodo 2015-2017, el dato de septiembre de este año sería el mejor desde aquel año.

En Andalucía, la consejera de Empleo, Formación y Trabajo Autónomo, Rocío Blanco, reconoció que los datos de paro registrado en Andalucía “no son buenos”. En total, pese a haber fluctuado en función de la provincia, el desempleo en la comunidad autónoma es de 763.355 parados —4.866 más que en agosto—. “Aún así son los menos malos en los últimos seis años”, puntualizó la consejera, que comentó los datos del número de parados en las oficinas de los servicios públicos de empleo en Andalucía el pasado mes de septiembre, cuando el desempleo subió en la comunidad en 4.866 personas, lo que supone un incremento del 0,64 %.

Unos datos esperados por algunos, negativos para otros y no tan malos para el resto que son la tendencia habitual del cambio de estación entre agosto y septiembre.

Hay 1.533 extranjeros sin trabajo en la provincia

El número de inmigrantes sin trabajo en Jaén es de 1.533. En esta línea, es la provincia andaluza donde hay una menor tasa de desempleo. La mayor parte de parados se concentra en Málaga, donde hay 15.367 en septiembre. Por detrás está la provincia de Almería, que registra 13.029 desempleados extranjeros. En tercera posición está Sevilla, con 7.175. La siguiente —Granada— registra 6.086 parados. Cádiz, Huelva y Córdoba, con 5.041, 3.839 y 2.404, ocupan la mitad de una tabla que cierra Jaén, con 1.533 empleados inmigrantes en el paro.

En Andalucía, los datos de desempleo entre extranjeros ha bajado un 1,85% —en total 1.029 personas— el pasado mes de septiembre en relación al mes anterior, de forma que actualmente hay en la comunidad un total de 54.474 desempleados extranjeros, lo que supone un 2,17% menos que hace un año y el 14,8% del total de los que hay en España, cifrados en 365.923 personas, según los datos oficiales del mes pasado.

El número de autónomos crece “a fuego muy lento”

Los datos del Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) revelan que Andalucía, tras la temporada veraniega, vuelve a la senda del crecimiento con un aumento de 1.563 autónomos. Tras dos meses de descensos consecutivos, Inés Mazuela, secretaria general de UPTA Andalucía, señala que “todas las provincias obtienen un aumento de trabajadores por cuenta propia, a excepción de Cádiz (-101) y Huelva (-154) que son las que más se resienten por la estacionalidad que sufre Andalucía”. Por otro lado, destaca el incremento, sobre todo, de la provincia de Sevilla —con 906—, seguida de Málaga —con 365—, Granada —donde aumentaron 278—, Córdoba —con 154 más—, Almería —con 94— y, por último, los 20 de Jaén.

La afiliación al RETA en Andalucía mostró un comportamiento muy similar al de 2018 en cuanto al crecimiento mensual, un 0,29%. Si se analizan los datos interanuales, se puede ver, como indica Mazuela, que el crecimiento se produce “a fuego muy lento”.