89.000 jiennenses se acogen a la PAC para mantener sus olivares

Jaén, con un 37% de las solicitudes, vuelven a ser la provincia que más incentivos pide a la Unión Europea

16 may 2018 / 08:32 H.

Acabó. Seguro que muchos dan gracias a San Isidro, el patrón del campo, porque solicitar la ayuda para recibir los incentivos de la Política Agraria Común (PAC) no es nada sencillo. Que si la aparcería, que los arrendamientos, los derechos históricos o las solicitudes de incentivos para jóvenes son algunas cuestiones que hacen que se complique bastante. Sin embargo, los agricultores tienen muy claro que realizar el papeleo de la PAC es tan importante como recoger la cosecha, curar los olivos, quitar las varetas o preparar los ruedos. De hecho, muchos tienen interiorizado este trámite dentro de su calendario anual de faenas indispensables para el campo. Nadie se puede olvidar de hacer la PAC.

Una vez más, Jaén se convierte en la provincia andaluza y, consecuentemente, en la región de Europa que más incentivos solicita a Bruselas dentro de la Política Agraria Común (PAC). Hay 89.000 jiennenses o, casi lo que es lo mismo, unas 89.000 familias que piden ayuda para poder cultivar, generalmente, el olivar, aunque también está abierto a otros cultivos. Constituye el 37% de todos los expedientes que se presentan en Andalucía. Además, hay que tener muy presente la importancia que tiene esta política. No hay que olvidar, tal y como recordó el pasado lunes el consejero de Agricultura, Rodrigo Sánchez Haro, que la PAC 440 millones de euros en la provincia el año pasado —entre ayudas directas y dinero para programas rurales—. Asimismo, el peso social también es extraordinario, ya que, esta campaña, existen 89.000 demandantes en una provincia en la que viven 648.000 personas. Además, los derechos históricos hacen que los agricultores jiennenses —sobre todo, los olivareros— tengan los pagos por hectárea más grandes de Europa.

Precisamente, el consejero de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural, Rodrigo Sánchez Haro, precisa que, tras finalizar el plazo de presentación de solicitudes de las ayudas de la Política Agrícola Común (PAC) —el pasado viernes 11 de mayo—, la Consejería ha recibido 238.301 peticiones, entre las que destaca el aumento de peticiones por parte de jóvenes agricultores y ganaderos. El consejero indica que las ayudas abarcan el apoyo a la renta de los ganaderos a través de pago básico, ayuda asociada, el pago adicional para jóvenes y compensaciones por prácticas beneficiosas para el medio ambiente, registrando éstas últimas un total de 51.000 solicitudes más.

Por provincias, la que más solicitudes ha generado ha sido Jaén, con un total de 89.000, lo que supone el 37% del total; seguida de Córdoba, con 41.500 peticiones (17%); Granada, con 36.400 (15%), y Sevilla, con 29.200 (12%). Por su parte, Rodrigo Sánchez Haro indica que se han presentado 2.051 solicitudes de pago adicional a jóvenes agricultores y ganaderos, que en 2018 han visto incrementado del 25 al 50% los derechos de pago básico de este ayuda adicional. “Este incremento, apoyado por el Gobierno andaluz y aprobado por la Unión Europea (UE), hace más atractiva la incorporación de los jóvenes en la agricultura y la ganadera”, recuerda.

Así, se han registrado un 28% más de solicitudes de pago adicional para jóvenes con respecto a la campaña anterior. “Esto pone de manifiesto la importancia de las políticas que desarrollamos desde la Junta en materia de relevo generacional e incorporación de jóvenes, ya que en 2017 también aumentó un nueve por ciento respecto al año anterior”, afirma Rodrigo Sánchez Haro.

En este sentido, el 94% de las solicitudes las han realizado personas físicas, de las cuales, el 60 por ciento son hombres mientras que el otro 40% las han pedido mujeres. Asimismo, el 82% de las solicitudes se han presentado en el régimen general de pago básico, mientras que el 17%, lo que se corresponde con 41.900 solicitudes, han escogido el régimen de pequeños agricultores, destinados para aquellas que reciben de 1.550 euros. El consejero explica que se ha producido una disminución del número de solicitudes en el ámbito de pequeños agricultores debido a que “el pago mínimo se ha elevado de 100 a 300 euros en 2017 y que dicho régimen presenta problemas con la tolerancia, en caso de que la superficie real no coincida con la declarada”. Además, el consejero recuerda el aumento del plazo para la presentación de solicitudes previsto para el 30 de abril pero que finalmente, por petición del colectivo agricultor y ganadero, se fijó en el 11 de mayo. Con respecto a otras comunidades que han cerrado el plazo más tarde, Sánchez Haro ha argumentado que en Andalucía ha finalizado con anterioridad para “realizar cuanto antes los controles y asegurar el mayor número de pagos en el anticipo de octubre”.

Defensa de la PAC. Paralelamente, el consejero de Agricultura manifiesta que Andalucía es el “mayor organismo pagador del país y uno de los mayores de Europa”. “Estamos gestionando cada año más de 1.400 millones de euros de los que unas 240.000 personas resultan beneficiarias en Andalucía, tanto en el apoyo de la renta como para la conservación de bienes”. Por ello, argumenta: “La propuesta de la Comisión Europea de reducir el presupuesto en un 16% de la PAC para el periodo 2021-2027 pone en peligro este apoyo muy necesario para el mundo rural”. Por este motivo, Sánchez Haro exige al Gobierno central que “defienda el compromiso de evitar cualquier disminución del presupuesto”. Precisamente, el consejero aclara que los cálculos que realiza el Ministerio de Agricultura, que apuntan a una reducción menor no tienen en cuenta la inflación genera en los años que pasarán de una PAC a otra.

Por otro lado, como novedad, la Consejería ha creado la aplicación para dispositivos móviles “InfoPAC Andalucía” a través de la cual se facilitará información “rápida y sencilla” sobre el estado de las solicitudes e incidencias, con el fin de “impulsar la mejora y el control de la gestión”. Asimismo, también ha impulsado “SGA Captura 2018’”, una aplicación destinada a la tramitación de la solicitud única y presentación de alegaciones al sistema de localización geográfica agrícola. Para ello, las entidades colaboradoras del proceso han recibido formación continua de manera presencial, telemática y mediante vídeos.

El precio del aceite baja en Jaén y se mantiene en Túnez y en Italia

El Observatorio de Precios de la Fundación del Olivar (Poolred) indica que el aceite de oliva virgen extra se paga a 2,70 euros por kilo. Jaén, al igual que España —de la que es referencia—, continúa en una constante bajada del precio del zumo de la aceituna. Sin embargo, se trata de una crisis totalmente interna o, lo que es lo mismo, localizada entre las empresas jiennenses y españolas. En un mercado mundial, en el que las estimaciones de cosecha se hacen en función de las producciones internacionales, parece evidente que el desplome de la cotización del zumo de la aceituna solo afecta aquí. Si se repasan los datos de mercado internacionales, mientras que en Jaén se vende el virgen extra a 2,70 euros por kilo —a granel—, en Italia cotiza a 4,10 euros. Además, la cotización no cae de una semana a la otra, sino que mantiene una tendencia estable. En Grecia y Túnez ocurre lo mismo. El zumo de aceituna se vende a 3,63 en el primero, mientras que cotiza a 3,43 en el segundo. Por otro lado, en Jaén se venden los lampantes a 2,25 euros por kilo. En cambio, en Italia salen al mercado a 2,44 y en Grecia, a 2,28. Por otro lado, resulta bastante significativo una sensación que existe en la provincia jiennense. Muchos cooperativistas y propietarios de aceite de oliva comentan con incertidumbre que las grandes empresas italianas todavía no han venido a la provincia a comprar importantes partidas, a diferencia de lo que ocurre en otros años. Esto hace que algunos propietarios de zumo de aceituna se precipiten y salgan al mercado con partidas más baratas de lo que marcan las condiciones actuales. No obstante, parece una realidad evidente que griegos, italianos y tunecinos defienden unos mejores precios del aceite de oliva que en España. Es cierto que existe una mayor cosecha, que hay que vender, pero las precipitaciones caídas en las últimas semanas, la ausencia de compradores internacionales (que todavía han tenido poca presencia en la provincia) y la sensación de que habrá una cosecha importante para el año que viene —algo que no está garantizado— hace que el precio del aceite baje aquí y se mantenga en otros países.